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A tres años de su construcción para conmemorar 200 años del inicio de la Guerra de Independencia, el Parque Bicentenario, en la delegación Miguel Hidalgo, es un espacio frecuentado por capitalinos del norte y poniente del Distrito Federal, aunque aún no pueden aprovechar diversos espacios que están en desuso.

Los visitantes del Parque Bicentenario, construido en terrenos de la ex refinería 18 de Marzo, resaltan su mantenimiento en áreas verdes y canchas, pero algunos criticaron que el museo y el lago de este predio están cerrados.

“Llevo dos años viniendo a correr, el parque ha mejorado pero el museo no abre y el lago, aunque tiene lanchas, no se pueden usar”, comentó un corredor que acude a diario a este sitio para ejercitarse.

El lago, inaugurado posteriormente —hasta noviembre de 2012—, cuenta con 20 lanchas sin motor de reciente adquisición, las cuales lucen apiladas en un muelle.

Un millón de visitantes

El Parque Bicentenario tiene una superficie de 55 hectáreas. Cada año acuden cerca de un millón de visitantes, de acuerdo con cifras de la administración del lugar.

El ex presidente Felipe Calderón Hinojosa inauguró en noviembre de 2010 este espacio de 55 hectáreas; sin embargo, en esa fecha una sección seguía inconclusa y fue hasta el 30 de noviembre del año pasado, en su último día de gestión, que el jefe del Ejecutivo federal inaugurará esa sección, donde se encuentra el lago y el jardín Agua.

El lugar cuenta con varios inmuebles de cristal que reproducen ecosistemas como bosques y desiertos, también tiene una ciclopista, una pista para correr, áreas verdes, canchas de futbol, volibol y de basquetbol, así como un auditorio al aire libre poco utilizado, según los vecinos y visitantes frecuentes, entre otras atracciones del parque.

Desocupan restaurante

Hace poco tiempo, otro edificio de cristal que albergaba un restaurante quedó desocupado.

Algunos desniveles en la pista para trotar se convierten en encharcamientos con las lluvias, en especial, durante esta temporada, aunque la pista luce limpia al igual que el resto de las instalaciones, comentan.

Desde su construcción, en el Parque Bicentenario aún queda un predio cercado con malla ciclónica, en el cual hay tablas, baldosas y tabiques tirados.

“Llevamos seis meses viniendo y no hemos tenido problemas, hay mejoría, porque siempre le dan su mantenimiento y existe vigilancia”, expresó otra deportista habitual que es vecina de la delegación Azcapotzalco.