ruth.rodriguez@eluniversal.com.mx  

El cardenal Norberto Rivera Carrera denunció una presunta extorsión de La Familia Michoacana en contra de seminaristas y sacerdotes de la Arquidiócesis Primada de México, que él encabeza.

El también arzobispo primado de México reveló que la semana pasada, en el Seminario Conciliar de México recibieron diversas llamadas telefónicas de personas que se identificaron como presuntos integrantes del cártel de La Familia Michoacana, quienes demandaron el pago de 60 mil pesos.

“La semana pasada, estábamos reunidos ahí en el Seminario, en nuestro seminario, y varias veces llamaron. Se identificaban como de La Familia Michoacana. Pero, quién sabe. Hablé a las autoridades, hicimos la denuncia correspondiente”, detalló el prelado.

Respecto a estas llamadas amenazantes, explicó que “querían, para empezar —porque si no matarían a alguno de nosotros—, querían para empezar 60 mil pesos. Y si empieza uno a pagar, pues ¡ya se hizo cliente!”, dijo Rivera Carrera.

Ante lo ocurrido, dijo a los feligreses, al encabezar la misa dominical en la Parroquia de Santo Tomás Moro, de la colonia Florida, se dio aviso a las autoridades correspondientes para que investiguen.

Asimismo, durante la homilía, pidió a los feligreses denunciar las extorsiones y abusos, no asustarse y negarse a pagar. Dicho tipo de situaciones, agregó, se han vuelto cotidianas.

En contra de la violencia

Durante la homilía, el jerarca religioso manifestó que el crimen y la violencia en México se sienten cada vez más cerca de las familias y llamó a construir una cultura de la paz y el amor fraterno en el país.

“Todos de alguna manera sabemos historias cercanas a nosotros, por las cuales la violencia, esa violencia que muchas veces se engendra ahí en la propia familia va creciendo. Se refleja en otras muchas acciones en la sociedad y después nosotros nos asustamos, claro está”, destacó.

El cardenal exhortó a los feligreses a promover la convivencia fraternal desde la familia y en todos los ámbitos sociales, y hacer a un lado los modelos de violencia que se transmiten en los programas de televisión.

“No podemos seguir alimentando la espiral de la violencia intrafamiliar, ni seguir soportando los modelos de violencia que se difunden en los medios de comunicación, ni aceptar ningún programa que venga a acentuar la pobreza, ya centenaria de nuestro pueblo, causa y origen de tanta violencia”, destacó en la misa dominical.

La misa en la Catedral Metropolitana fue oficiada por Manuel Arellano, rector del templo, quien refirió que ayer comenzó el primer domingo de Advenimiento para prepararse a la Navidad. Este templo católico no lució lleno, y sólo fue abierta una puerta que sirvió de entrada y salida para los feligreses.