Crónica Barriles de crudo a manera de urnas
MÍTIN. La marcha encabezada por Andrés Manuel López Obrador partió del Ángel de la Independencia y concluyó en el cruce de Reforma y Bucareli. (Foto: TANYA GUERRERO EL UNIVERSAL )
politica@eluniversal.com.mx
Mientras Andrés Manuel López Obrador exponía su idea de plan de acción a seguir para “la defensa” del petróleo y la soberanía nacional, miles de hojas comenzaron a pasarse de mano en mano entre la multitud.
Eran las tres propuestas a elegir por los asistentes a la marcha para iniciar lo que el tabasqueño ha llamado “desobediencia civil pacífica”.
En medio del gentío, el profesor Heriberto Cruz, integrante de la sección 22 de la CNTE, dobla su hoja, la deposita dentro de la urna 77, con forma de barril de petróleo.
“La propuesta está muy buena; dentro de los ejercicios que nosotros hacemos como la CNTE, éstos son parecidos, el cerco a la Cámara de Diputados, nosotros ya lo hicimos”, dijo.
Aunque López Obrador llamó a la desobediencia civil, también insistió en mantener la paciencia, ser perseverantes y cerrar el paso a la violencia.
“Lo más radical es no claudicar, no cansarnos, y seguir trabajando para sumar voluntades”, indicó ante miles de seguidores del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que ayer ocuparon apenas el tramo de Bucareli a Insurgentes, sobre Paseo de la Reforma, a diferencia de la quincena pasada cuando la columna de la movilización se extendió desde la Glorieta de Colón a la Estela de Luz.
Ayer se notó la ausencia de los contingentes de estudiantes, de maestros de la CNTE y de las representaciones de Morena más numerosas. La marcha desde el Ángel inició tan pronto López Obrador se incorporó a la multitud que ya lo aguardaba.
A la altura del centro comercial Reforma 222, Andrés Manuel López Beltrán, su hijo, presumía uno de los gafetes exclusivos para tener acceso al templete principal, pero no caminó hacia el escenario, se quedó rezagado y prefirió tomarse fotografías con varias seguidoras de Morena, para después separarse de la manifestación.
Mientras, en la “burbuja” —el cinturón de seguridad del ex candidato presidencial— algunas mujeres exclamaron un “ahhh”, cuando el pequeño Jesús Ernesto —hijo menor de López Obrador— marchaba vestido con el uniforme del club Barcelona.
Varios de los asistentes prefirieron distraerse en los puestos de comida, de los souvenirs políticos para adquirir el muñeco “Amlito” o gorras con la estrella roja comunista; videos del “fraude electoral” y algunos incluso se pusieron a jugar cartas en la banqueta.
Maestros de la CNTE aprovecharon para solicitar apoyo económico; el SME lo mismo vendía café, tacos, tortas, al igual que decenas de ambulantes que ofertaban chanclas, fajas y mallones térmicos desde 50 pesos. (Con información de Carina García).