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Integrantes de El Barzón Nacional se concentraron en Paseo de la Reforma y Bucareli, donde regalaron 600 kilogramos de frijol en bolsas de 200 gramos, en demanda de precios justos para ese producto, pues en promedio se paga al productor a seis o siete pesos el kilogramo y el consumidor lo encuentra en los anaqueles de las grandes tiendas a 18 o 20 pesos el kilogramo.

"Existe una gran distorsión que debe ser combatida finalmente, a eso vienen los productores del campo (al DF en caravana para mañana) a demandar que se intervenga en el mercado agroalimentario mexicano, a pedir en el caso del frijol, maíz y sorgo, un precio justo y en el caso del frijol que se ponga un precio mínimo de 11 pesos al productor", demandó Uriel Vargas, secretario de Comunicación de El Barzón.

Luego de anunciar que mañana miles de hombres y mujeres procedentes de varios estados como Chihuahua, Sinaloa, Sonora, Puebla y Morelos vienen en caravanas para movilizarse de la glorieta de la Columna de la Independencia a la sede de la Secretaría de Gobernación, Vargas sostuvo que si se quiere combatir el hambre, se debe incluir a los productores.

"Es necesario que el gobierno llegue antes que los coyotes y fusione Diconsa y Liconsa, y que llegue antes que ellos y ponga buen precio", sostuvo el vocero de El Barzón, quien subrayó que en la protesta de mañana la demanda es "el pago justo por sus productos y terminar con los altos precios de la canasta básica que sacrifica los ingresos de millones de consumidores mexicanos".

Dijo que los campesinos plantean que el mercado agroalimentario debe ser reordenado y el Estado debe intervenir como regulador y participar como competidor para superar el control oligopólico en las cadenas de acopio, comercialización y ventas al menudeo.

Destacó la necesidad de que intervenga la Secretaría de Gobernación y siente en una mesa de decisión a otras dependencias como las Secretarías de Agricultura y Economía. Se trata, dijo, de una acción conjunta en donde se tome en cuenta a los productores y se valore su trabajo.

Se requieren, continuó, apoyos a la comercialización, que se tome en cuenta a los pequeños productores que son los que realmente pueden hacer fuerte al país en su demanda de alimentos.

De acuerdo con información de El Barzón, los precios de los granos y productos agrícolas se han desplomado, en un marco en donde las cosechas son abundantes gracias a las bondades de las lluvias, con inventarios suficientes.

Además, las inversiones especulativas se han trasladado hacia las mayores ganancias de un dólar fuerte y la demanda para producir etanol se ha reducido, al tiempo que el consumo cae por los altos precios al consumidor y la debilidad de los mercados internos.

Paralelamente, el maíz se desploma desde los 5 mil pesos en 2011 a menos de 3 mil pesos en la actualidad con el agravante de que en el 2014 se consiga a 2 mil 300 pesos por tonelada. En tanto el precio de la tortilla se quedó arriba con precios entre 12 y 17 pesos el kilogramo, según la región del país.

Por ello, insistió se requiere de un cambio de ruta para enfrentar la demanda de alimentos, reducir las importaciones y se tengan precios justos.

spb