PHOENIX (Notimex).— El sheriff del condado de Maricopa, Joe Arpaio, reconoció ayer que usó gas lacrimógeno para detener a 13 indocumentados durante un operativo realizado el martes pasado en Phoenix, en una acción calificada por activistas como “excesiva”.

“El gas se lanzó para forzar a los ocupantes de la casa a salir”, indicó Arpaio en un comunicado que fue distribuido por su oficina.

Un total de 13 “extranjeros ilegales” fueron arrestados y ninguna persona resultó lesionada durante el operativo, indicó el sheriff de Maricopa, Arizona, quien es conocido en Estados Unidos por su férrea posición antiinmigrante. Arpaio no mencionó en el comunicado ninguna acción que justificara el uso de gas lacrimógeno, pero calificó de “atrincheramiento” la actitud de los indocumentados al decidir resguardarse dentro de la vivienda tras ser sitiados por los agentes del SWAT.

Pero Jennifer Allen, directora de la Red de Acción Fronteriza, organización con sede en Tucson que trabaja en la defensa de los derechos de los inmigrantes en Arizona, denunció que Arpaio “está usando el gran palo en cada acción que realiza con inmigrantes”.

“El uso de gas” para arrestar a indocumentados “constituye un uso excesivo de fuerza”, aseguró.

De acuerdo con Arpaio, el incidente se inició luego de que la Oficina del Sheriff iniciara una investigación para ubicar un “vehículo cargado con contrabando humano”. Al detectarse el vehículo sospechoso, agentes del Equipo Especial de Tácticas y Armamento (SWAT) de la Oficina del Sheriff, fueron enviados al lugar, indicó.

Los agentes del SWAT lanzaron gas lacrimógeno a través de las ventanas de la vivienda para forzar a sus ocupantes a salir, agregó.

Explicó que “el cabecilla de los contrabandistas” que albergaba a los inmigrantes fue detenido al tratar de huir de la vivienda, donde luego de una inspección se localizó una pistola nueve milímetros y varias balas.

Esta es la primera vez que el sheriff de Maricopa reconoce haber utilizado el gas lacrimógeno para detener a los indocumentados, quien ha lanzado diversas redadas para atrapar a migrantes. “Las detenciones de ayer demuestran que el problema de contrabando de drogas y de extranjeros ilegales parece fuera de control y continúa dentro del condado Maricopa”, señaló Arpaio. Adelantó que “pronto habrá una operación masiva dirigida a poner fin a la invasión de drogas y de extranjeros ilegales en el valle, incluyendo Phoenix”.