ROMA (Agencias).— La Fiscalía de Milán busca un juicio “inmediato” contra el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, acusado de abuso de poder y “prostitución de una menor de edad”, por el caso de su presunta relación con Kharima el Mahroug, más conocida como Ruby Rubacuori (Ruby, la robacorazones).

El procurador de Milán, Edmondo Bruti Liberati, confirmó la apertura de una indagación contra Berlusconi, un día después de que la Corte Constitucional derogó parcialmente la llamada “ley del legítimo impedimento”, que otorgaba inmunidad temporal a Il Cavaliere, ya involucrado en otros tres procesos por corrupción y fraude.

El fiscal precisó en un comunicado que los delitos atribuidos a Berlusconi habrían sido cometidos en Arcore (donde tiene una de sus lujosas mansiones) entre febrero y mayo de 2010, cuando Ruby, quien entonces tenía 17 años, lo visitó varias veces. Explicó que se pedirá el juicio inmediato contra el premier porque el caso reúne los requisitos establecidos por ley, es decir, evidencia de pruebas, inscripción en el registro de indagados por un tiempo menor a tres meses y convocación del indagado ante la magistratura.

De acuerdo con la acusación de los fiscales Ilda Boccassini, Antonio Sangermano y Pietro Forno, videos y fotos encontrados en el ordenador de la joven, así como algunas llamadas telefónicas, demuestran que la joven estuvo al menos seis veces en la villa de Arcore cuando tenía 17 años. Berlusconi y Ruby, quien trabaja como bailarina, han negado haber mantenido relaciones sexuales.

La fiscalía cree que ambos mienten. En Italia se castiga con entre 6 meses y 3 años de cárcel a quien realice actos sexuales con un menor de entre 14 y 18 años, a cambio de dinero u otra retribución. La edad de consentimiento en Italia es de 14 años, pero la explotación o favorecer la prostitución de menores de 18 años es un delito.

El representante artístico Lele Mora y el periodista Emilio Fede, quienes habrían llevado a Ruby y a decenas de mujeres más a las fiestas del jefe de gobierno italiano.

El delito de “concusión” (abuso de poder) que se atribuye a Berlusconi tiene que ver con su mediación directa para que la policía liberara a Ruby el pasado 27 de mayo, cuando fue arrestada por robo.

Gracias a la intervención del premier, quien aseguró a la comisaría central de Milán que la joven era sobrina del presidente egipcio Hosni Mubarak, Ruby “obtuvo la libertad y fue entregada a la custodia de la ‘higienista’ dental de Berlusconi, Nicole Minetti, asesora del partido oficial y ahora acusada de ‘inducción a la prostitución’”.

Berlusconi negó ayer mismo las acusaciones y denunció lo que llamó la enésima persecución en su contra de una magistratura “politizada”. “No veo la hora de poder defenderme en el tribunal de acusaciones tan absurdas”, declaró el premier en un mensaje de audio, en el que aseguró que los fiscales simplemente estaban “celosos” de que no los había incluido en la invitación a cenar.

Subrayó lo “extraño” de que la investigación se conociera al día siguiente del fallo de la Corte Constitucional que le invalida la inmunidad. “Francamente imaginaba que esperarían al menos una semana antes de volver a empezar luego de la decisión de la corte”, dijo. “Como sea, mis abogados están contentos”, bromeó. “Están seguros de que conmigo nunca les faltará trabajo”. Según el jefe de gobierno, ha sido sometido a más de 100 investigaciones y 28 juicios, pero nunca lo declararon culpable.