BRUSELAS (DPA).— El nuevo primer ministro belga, el democristiano Herman van Rompuy, juró ayer su cargo ante el rey Alberto II, poniendo fin a una crisis de gobierno desencadenada en el país por la dimisión de su precedesor, Yves Leterme, y el conjunto del Ejecutivo el 19 de diciembre.

Rompuy seguirá gobernando con la misma coalición integrada por cinco partidos. También los 22 ministros y secretarios de Estado de Leterme mantendrán sus puestos casi en su totalidad en el nuevo gobierno, aunque habrá cambios de personal en los ministerios de Interior, de Justicia y de Empresas Públicas.

Anteriormente los presidentes de los cinco partidos que forman la coalición de gobierno (conservadores y liberales de la zona flamenca y francófona y los socialistas, de ésta última) habían ultimado los detalles de un programa conjunto de gobierno.

De esta forma, se descarta la convocatoria de elecciones adelantadas. La coalición continuará trabajando sobre las bases del programa del anterior gobierno y aplazará la solución de las cuestiones más controvertidas —como son la reforma del modelo de Estado y la nueva conformación de los distritos electorales de Bruselas y alrededores, de habla tanto francesa como flamenca— para la época posterior a las elecciones europeas y regionales en junio de 2009.

Los negociadores del programa se pusieron también de acuerdo sobre la investigación del affaire en torno a la venta del gran banco belga Fortis, que provocó al dimisión de Leterme y de su gobierno. Al ex primer ministro se le acusa de intentar influir en el tribunal competente que decidía sobre la venta del banco.

Según el acuerdo, la comisión de investigación prevista estará conformada principalmente por expertos. El viernes, el Parlamento deberá dar su confianza al nuevo gobierno.

El democristiano Van Rompuy, de 61 años, era hasta ahora presidente de la Cámara de Diputados. En ese puesto lo sucederá el hasta ahora ministro del Interior, Patric Dewael, al que a su vez sustituirá el diputado Guido de Padt.

De forma sorpresiva, la ministra de Empresas Estatales, Inge Vervotte, anunció ayer su renuncia a ocupar el cargo, alegando los daños políticos y personales sufridos por la dimisión de su mentor Leterme y del ministro de Justicia, Jo Vandeurzen. El nuevo ministro de Justicia será Stefaan de Clerck.

Van Rompuy, con una reputación tanto de intelectual como de duro, es el tercer primer ministro desde las elecciones generales de junio de 2007. Entre 1993 y 1999 fue ministro de Presupuestos y redujo fuertemente la deuda pública el primer año.