CUBA (AP).- Algunos detenidos en la bahía de Guantánamo se convirtieron ayer en los primeros en entrar a una nueva prisión de máxima seguridad, una instalación de 37 millones de dólares diseñada para restringir el contacto entre detenidos y guardias.

Un total de 42 detenidos fueron trasladados a la cárcel, colocada encima de una meseta con vista al Caribe, desde otro campamento de máxima seguridad en la base naval estadounidense en Cuba, dijo el comandante de la Armada Robert Durand.

La prisión de 178 celdas, colocada a un costado de otra instalación de máxima seguridad construida en el 2004, permitirá suspender el uso del Campamento 3, que fue construido en el 2002 con muros gruesos y de barreras de metal, indicó Durand.

Investigadores de la ONU especializados en la defensa de los derechos humanos y gobiernos extranjeros han pedido a EU que cierre todo el centro de detención. Pero al no haber un final próximo a la guerra contra el terrorismo, las autoridades de Guantánamo indicaron que la inversión es necesaria para llevar a cabo la misión de mantener detenidos a quienes se considera combatientes enemigos.