WASHINGTON (DPA, AFP, AP y EFE). El escándalo político que rodea a la familia Clinton, sobre los perdones otorgados a condenados por la justicia por el ex presidente antes de finalizar su mandato, cobró ayer un nuevo giro cuando surgieron versiones de que la fiscal general de Manhattan está investigando si la clemencia concedida a cuatro judíos hasídicos condenados, de la localidad de New Square ?estado de Nueva York influyó en los votos que Hillary obtuvo en esa comunidad en las elecciones del 7 de noviembre pasado y cuyo resultado fue aplastante en su favor: Los cuatro judíos perdonados por Clinton habían sido condenados por robar unos 40 millones de dólares de fondos estatales mediante la creación de una escuela religiosa ficticia que recibía subsidios.

La semana pasada, la fiscal federal de Manhattan, Mary Jo White, y la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) afirmaron que se había iniciado una investigación sobre los perdones presidenciales ?que serían 136, pero no habían dado otros detalles. El diario ?New York Post? informó ayer que el caso de los judíos estaba incluido.

White ya está investigando la amnistía más controvertida, obtenida por el fugitivo financista Marc Rich.

?Hemos anunciado la semana pasada una investigación sobre el perdón acordado a Rich (millonario prófugo) y Pincus Green (su socio), y por ahora nos mantenemos en eso?, dijo un vocero de White.

?Sin comentarios?, afirmó un portavoz del FBI en Nueva York, interrogado acerca de la ampliación de la investigación que busca determinar si Clinton violó la ley federal al perdonar a Rich, cuya ex esposa Denise es una importante recaudadora de fondos para el partido demócrata.

Según el ?Post?, la investigación examinará si Clinton perdonó a los individuos a cambio de votos de la comunidad hasídica (secta ultraortodoxa judía) en el condado de Rockland para la campaña senatorial de su esposa, en noviembre pasado.

El diario recuerda que la comunidad hasídica de New Square votó por abrumadora mayoría en favor de Hillary Rodham Clinton.

Al caso de los judíos, que podría caer directamente sobre las espaldas de la flamante senadora Clinton, se le agrega el dinero que su hermano Hugh Rodham cobró de las familias de otros dos hombres perdonados (400,000 dólares) y que esta semana se vio obligado a devolver.

Por otra parte, el administrador financiero de la campaña electoral de la ex primera dama, el abogado William Cunningham, negó fechoría alguna en sus esfuerzos por asegurar los perdones para dos propietarios de restaurantes de Arkansas, estado de donde son originarios los Clinton.

Cunningham defendió ayer en Nueva York su papel en las gestiones para obtener los indultos para Robert Fain y James Lowell Manning, hallados culpables en Arkansas de fraude fiscal en los años 70, y que fueron perdonados por Clinton.

En rueda de prensa en Manhattan, el abogado y socio de quien fuera uno de los principales asesores políticos de Clinton, Harold Ickes, aseguró que sólo se había ocupado de preparar las aplicaciones para obtener el perdón de los dos hombres, por lo que había cobrado 4 mil dólares.

Cunningham aseguró que nunca habló con Hillary Clinton, ni con nadie del departamento de Justicia o de la Casa Blanca, para estas gestiones.

Además, el ?New York Times? reportó este viernes que Roger Clinton, medio hermano del ex presidente de Estados Unidos, intentó usar su influencia sobre Bill Clinton para que acordara su gracia presidencial a varios de sus conocidos.