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Thierry de Beyssac, director general de Hewitt Associates, ha sido el artífice del posicionamiento de la empresa estadounidense especialista en la administración de recursos humanos en el mercado europeo.

Desde hace dos años es el encargado de las operaciones de la firma en América Latina.

Thierry de Beyssac considera que en México se debe encontrar la forma de impulsar el talento más rápido sin tener ningún problema con la edad o el sexo, situación que se observa en otras naciones.

¿Cuántos años lleva en la firma Hewitt Associates?

Desde hace 24 años mantengo una relación estrecha con esta “joven dama” de más de 65 años de edad, líder mundial en outsourcing y consultoría en recursos humanos. Me inicié como emprendedor al ser egresado de la carrera de Comercio Internacional con especialidad en Ciencias Económicas de París; luego se me ocurrió poner una empresa de mercadotecnia y comunicación, y por buena suerte uno de los primeros clientes fue Hewitt Associates.

Así nació la relación con Hewitt, que recién iba desembarcando en el mercado europeo. Después de unos años de trabajar juntos, directivos de la compañía, con sede en Chicago, me ofrecieron ser parte de ella con la posibilidad de abrir oficinas y no lo pensé mucho.

Siendo hijo de diplomático acostumbrado a viajar, acepté y así comenzó la travesía: primero fue España, donde abrí las primeras oficinas y también ahí me enamoré del idioma español.

Fui escalando posiciones, como Busiess Diplomant para Europa; luego tomé la responsabilidad de toda la práctica de compensaciones y recursos humanos, después la dirección general de Francia, y sucesivamente España, Portugal y Suiza hasta llegar a México.

¿México es plataforma?

Cuando miramos hacia Latinoamérica hay dos países que destacan: Brasil y México; entonces estar aquí era muy importante para nosotros, sabíamos del liderazgo mexicano en la región, además de las ventajas que representa su cercanía con el mercado más grande del mundo; entonces fue prioridad establecernos en el país.

¿Qué es Hewitt Associates?

Es una compañía global con presencia en todo el mundo.

Según la región podemos ser el número uno o dos; tenemos una fuerza de trabajo de 24 mil personas en el mundo y más de 3 mil millones de dólares de facturación al año; esto es ya una cifra importante y, lo que realmente es importante, es que somos una empresa puramente especializada en recursos humanos, donde somos los mejores y en donde nos queremos quedar.

¿Cuáles son las áreas de influencia de su firma?

Lo que hacemos no es sólo consultoría, también manejamos los procesos, administramos programas de recursos humanos de nuestros clientes, tanto planes de pensiones, médicos, sistemas de compensación y reclutamiento de talento; dejamos la parte estratégica a la empresa y le ayudamos con la parte de consultoría, liberamos a nuestros clientes de la parte administrativa con plataformas tecnológicas muy desarrolladas y más eficientes para que se enfoquen en la estrategia de administración de recursos.

¿Cómo está la cultura de recursos humanos en México?

Es un país donde los recursos humanos están bien desarrollados, es decir, que aunque hay diferentes segmentos de mercado, el nivel de profesionalismo de los programas que se ven en México son de calidad mundial.

Esto se debe a la fuerte presencia de empresas multinacionales que exportaron a México programas, sus filosofías, sus estrategias de recursos humanos, pero también se explica cómo muchas oficinas de filiales de empresas multinacionales están aquí.

Después de haber tomado estos programas los mejoran y los tropicalizan, entonces hay una cultura de recursos humanos muy especial que representará una ventaja competitiva en el futuro. Hay un nivel de emoción de humanismo en México, que ya no existe en Europa y Estados Unidos desde hace mucho tiempo, y curiosamente lo notaron en Estados Unidos, primero, y Europa más tarde.

Los líderes de negocio necesitan volver a una gestión de sus colaboradores mucho más humana, teniendo en consideración la inteligencia emocional, que han perdido.

En México nunca se ha perdido y yo diría que incluso lo tenemos un poco sobresaliente.

Por un lado tenemos a Europa y Estados Unidos, que se están moviendo hacia una gestión de recursos humanos con herramientas muy formalizadas con procesos un poco fríos y que se mueven a una gestión más humana emocional en cuanto a desarrollo y desempeño de la gente. Mientras que Latinoamérica y particularmente México, se mueven en una gestión un poco emocional, en ocasiones muy paternalista, con herramientas y procesos que formalizan un poco más esta sesión que se ha hecho desde hace más de 10 años, sin perder el toque emocional de gestión muy personal y sobre todo de respeto.

¿Tenemos capital humano para impulsar el crecimiento?

En México existe talento como he visto en otros países, pero lo que necesita este país es un cambio cultural más rápido en cuanto hacer subir a este talento de manera más rápida sin consideración de la edad, sin la consideración del sexo, sin consideraciones jerárquicas, sin la aceleración de sucesiones, de las carreras del entrenamiento de este talento, del empoderamiento de este talento; es algo que tiene que venir ya.

Vemos muchas empresas que capacitan a su gente, la desarrollan de manera muy acelerada; esto es un problema, la jerarquía es todavía muy importante y entonces esto puede ser un freno, porque las organizaciones de hoy en día no son organizaciones de puestos, son organizaciones de proyectos; por ejemplo, tenemos gente que tiene sus puestos para manejar la crisis; ahora necesito desarrollar un producto o servicio innovador, quiero ver si podemos distribuir nuestros productos de otra manera, quisiera ver cómo puede cambiar la forma de atención al cliente; para eso es importante identificar dónde están mis potenciales de alto desempeño y le decimos: tú te vas a dedicar a este proyecto con este equipo, sin ser necesariamente un jefe.

El superjefe está ocupado manejando la crisis del día a día; si no tiene esa cultura que permite la flexibilidad de la empresas, difícilmente van a superar la crisis económica.

¿Qué representa lo anterior?

Mayor productividad para las empresas; también se convierten en el mejor embajador de la empresa hacia los clientes, hacia los candidatos a empleados de la compañía. Son gente que se proyecta en el futuro en esa empresa y es gente que quiere contribuir más con las exigencias que demanda el puesto.

Una persona comprometida sí es una persona que está en un entorno que va a dar más, que hace la diferencia en atención del cliente a la gestión de la productividad de los gastos de la empresa, etcétera.

¿Cuántos clientes tienen actualmente en el país?

Demasiados, más de 300 clientes. ¿Por qué digo demasiados? Nos distrae, nos obliga a compartir nuestro tiempo y lo que hemos hecho en México y en Latinoamérica ha sido finalmente intentar tener menos clientes, pero hacer más cosas para ellos, una contribución, mayor impacto sobre su eficiencia, sobre sus resultados; cuanto más cosas hacemos con un cliente mejor lo conocemos; conocemos su estrategia de negocio, conocemos a la competencia, conocemos el mercado; somos un poco más íntimos con ellos, socios de negocio, entonces podemos hacer mejores cosas por la empresa, para el cliente y sobre todo mayores utilidades para todos.

¿Son caros los servicios?

En empresas como la nuestra, sí. En muchos casos tenemos una reputación de ser caros por ser globales, por trabajar con empresas de recursos humanos sofisticados y en general trabajar con estrategias de recursos humanos muy sofisticadas, y creo que en parte es la verdad.

Hewitt siempre ha tenido una estrategia que consistió en su globalización. Sí queremos estar presentes en India, China, México, Brasil, Chile, etcétera; no queremos trabajar con las filiales de los clientes de Estados Unidos o Europa; queremos trabajar con empresas locales porque es la mejor manera de conocer el entorno nacional y servir de la mejor manera. Siempre hemos dado mayor importancia a los clientes locales, obviamente con una misión progresiva de los recursos humanos que trabajan con programas muy sofisticados.

¿Quiénes son sus clientes?

La gran mayoría de nuestros clientes son empresas chinas y de la India.

En México nos interesan muchísimo estas empresas de emprendedores, familias de éxito que han montado imperios en sectores como bancos, seguros, industria en general que tuvieron ese talento para desarrollar esas compañías que desde hace algunos años compiten con empresas transnacionales; sobreviven aún con crisis recurrentes y ellas mismas se regionalizan a otros países de América Latina y del mundo.

¿Cuáles son los beneficios?

Las empresas que quieren ganar tiempo hacen en tres o cinco años lo que muchas empresas hicieron en más de 15 años; quieren algo rápido, algo simple, porque no pueden saltarse 10 años de evolución natural.

Estamos hablando de cosas humanas, no es como un sistema informático; no podemos saltar dos generaciones de sistemas de recursos humanos como lo podemos hacer en informática, quieren cosas rápidas pero simples.

¿Cómo le ha ido a la compañía con la crisis económica?

Hewitt ya está en el año fiscal de 2010, y esperamos un año difícil como 2009, pero aun así esperamos crecer 7%, que es muy bueno, aunque estábamos creciendo a niveles de dos dígitos en los últimos años.

Tenemos un plan B para crecer 12%, debido a que nos hemos adaptado a la crisis y las ofertas que tenemos corresponden a lo que necesitan las empresas para salir de las debacles financieras y manejar los costos que son una prioridad. Las ofertas que tenemos están ajustadas a tiempos de crisis.