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Inicia Pemex el cierre de una planta petroquímica

Noé Cruz Serrano| El Universal
Miércoles 02 de mayo de 2007
Petróleos Mexicanos (Pemex) comenzó el proceso de desmantelamiento y venta de la planta petroquímica ubicada en Ciudad Camargo, Chihuahua, donde, a pesar de estar cerrada desde 2002, los trabajadores continúan cobrando sus sueldos, que en los últimos cuatro años representaron para Pemex un gasto equivalente a 920 millones de pesos

Petróleos Mexicanos (Pemex) comenzó el proceso de desmantelamiento y venta de la planta petroquímica ubicada en Ciudad Camargo, Chihuahua, donde, a pesar de estar cerrada desde 2002, los trabajadores continúan cobrando sus sueldos, que en los últimos cuatro años representaron para Pemex un gasto equivalente a 920 millones de pesos.

El pasado 8 de noviembre de 2006, en la sesión ordinaria 97 del Consejo de Administración de Pemex Petroquímica, la empresa autorizó "la desincorporación y baja de todos los bienes de la Unidad Camargo, que supone el desmantelamiento, retiro y venta de todos los bienes que conforman el complejo".

El lunes 9 de abril de este año, la Dirección General de Pemex Petroquímica, a cargo de Rafael Beverido Lomelín, la Subdirección de Administración y Finanzas y la Gerencia de Recursos Materiales de Pemex enviaron un oficio a todas las áreas de la paraestatal para notificar la decisión que deja sin empleo a 300 personas que siguen acudiendo todos los días al centro de trabajo, pero no realizan ningún tipo de actividad.

En Ciudad Camargo, los 300 trabajadores petroleros, entre sindicalizados y empleados de confianza, tenían la esperanza de que el gobierno federal desistiera de su propósito de cerrar el complejo que operó ininterrumpidamente durante 36 años.

En julio de 2005, este diario realizó una investigación sobre las condiciones en que se encontraba este complejo y pudo constatar que la planta estaba convertida en verdadera "chatarra". El diario además constató que el personal de la petroquímica ingresaba y sólo esperaba, y aunque preguntaban qué pasaría con su situación, ni el sindicato ni las autoridades de Pemex les daban respuesta. Ésta llegó luego de cuatro años mediante la notificación del desmantelamiento del complejo.

"Ser sindicalizado es una garantía para poder recibir alternativas como la liquidación, el despido voluntario o la reubicación, pero como empleado sólo nos piden la renuncia o ser transferidos, y por la especialidad de los ingenieros de esta planta, significaría desplazarnos a Veracruz, donde se asienta el emporio petroquímico de México, aunque ya tenemos una vida en Ciudad Camargo", dijo un empleado de confianza de la planta que pidió no ser citado en entrevista telefónica.

El complejo de Ciudad Camargo inició operaciones en 1967 y desde su origen su principal objetivo fue la elaboración y comercialización de productos para satisfacer la demanda de fertilizantes del norte del país.

Sin embargo, desde finales de 2002 de esa unidad no volvió a salir ni una sola tonelada de petroquímicos, especialmente amoniaco y bióxido de carbono, lo cual impactó severamente la economía de la región a grado tal que empresas como Fertimex y Pralaxis también tuvieron que cerrar por falta de materia prima.

El cierre definitivo de esta unidad productiva no sólo traerá desajustes entre los trabajadores petroleros, sino también entre la industria, el comercio y el sector agrícola de la región y, en especial, de Ciudad Camargo, Chihuahua.

Por lo pronto, la posibilidad de que dejen de circular alrededor de 219 millones de pesos anuales de gasto corriente que ejerció la planta hasta el año pasado por su efecto en cadena en la economía de la región está latente; de esa cantidad 113 millones corresponden a salarios y prestaciones de trabajadores y 29 millones de pesos más que gastan los pensionados y jubilados.

Poca capacidad de producción

Pemex Petroquímica es una de las cuatro subsidiarias de la petrolera mexicana que se dedica principalmente a los procesos petroquímicos no básicos derivados de la primera transformación del gas natural, metano, etano, propano y naftas (solventes incoloros). Sus principales clientes son las empresas dedicadas a la elaboración de fertilizantes, plásticos, fibras y hules sintéticos, fármacos, refrigerantes y aditivos.

De acuerdo con información operativa de la paraestatal, esta unidad de negocios cuenta actualmente con ocho centros de trabajo: el Complejo Petroquímico Independencia, el Complejo Petroquímica Cangrejera, el Complejo Petroquímico Cosoleacaque. Además del Complejo Petroquímico Morelos, el Complejo Petroquímico Pajaritos, el Complejo Petroquímico Tula, el Complejo Petroquímico Escolín y la Unidad Petroquímica Camargo.

En el informe financiero del tercer trimestre del año pasado, Pemex informó que la capacidad total de producción de la industria petroquímica estatal es de 9 millones 403 mil toneladas, pero el sistema que integran ocho complejos apenas está operando a 52% de su capacidad ante las deficiencias operativas.



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