Una empresa natural artificial
P ensar en Janel remonta a las cintas, notas y etiquetas adhesivas útiles para actividades del hogar y oficina. Sin embargo, esta empresa mexicana también fabrica y comercializa moños, listones decorativos, festones, guirnaldas, guías, coronas y árboles navideños bajo la marca Santa´s Land. Desde hace 12 años, Janel incursionó con esta división, luego de que sus directivos descubrieran la oportunidad en un nicho de mercado -hasta entonces descuidado- que sólo se abastecía con artículos de importación. Así, los hermanos Julio, Javier, Bernardo y José Kuri iniciaron la elaboración de árboles artificiales de Navidad. Pero el comienzo de Janel se remonta al 9 de octubre de 1953. En un pequeño local enclavado en el centro histórico de la ciudad de México, cinco trabajadores iniciaron con la fabricación de artículos de pasamanería, como encajes y pasadores. Karl Beissner, director de Ventas de Santa´s Land, una división de Janel, comenta que la estrategia para entrar al mercado de artículos decembrinos fue a través de árboles de gran tamaño. Los pinos de 3 y 5 metros que sólo se conseguían en tiendas departamentales, recuerda el directivo, eran muy caros y todos de importación. Sin titubeos, Janel confeccionó los primeros árboles de producción nacional e inició su carrera en este segmento de mercado. Después llegaron las guirnaldas, coronas y esferas, agrega el directivo. De nacionalidad alemana, Beissner fue el responsable de realizar las primeras ventas de Santa´s Land. De las 11 temporadas pasadas, comenta que la demanda ha ido en constante aumento. "La gente prefiere, en ocasiones, árboles artificiales porque son más fáciles de instalar y porque duran más años", indica. Sin precisar en el volumen de comercialización, Beissner asegura que la facturación de Santa´s Land alcanza una cuarta parte de Janel. Beissner explica que aunque los productos son de temporada, se trata de la época de mayor consumo entre las personas. Además, Beissner menciona que la planta de producción -instalada en Toluca- nunca se detiene. Esto permite que durante el fin de año se cuente con el inventario suficiente para abastecer la demanda nacional e, incluso, rebasar las fronteras a Centroamérica, entre ellas Guatemala, El Salvador y Costa Rica. Janel también llega a España, Francia, Italia, Noruega, Turquía, República Dominicana, Brasil y Estados Unidos. La marca cuenta con oficinas en la ciudad de México y es en la capital del país donde también fabrica gran parte de sus productos. La oferta Dentro de los artículos de la empresa destacan las etiquetas, cintas y notas adhesivas (Memo tip), masking tape y papel carbón. Aunque también fabrican despachadores de cinta, máquinas para embalaje e impresoras de códigos. Además de Memo tip, Janel es propietaria de las marcas Celosa y Celomágico con productos como hilos metálicos, diamantina y hologramas. La línea navideña, detalla Beissner, incluye árboles artificiales, coronas, guirnaldas -metálicas y de colores pastel-, además de esferas de plástico metalizadas. Otra de las estrategias que ha seguido la compañía, comenta el directivo, consiste en producir líneas exclusivas para tiendas de autoservicio. Así, las cadenas pueden ofrecer árboles navideños bajo su propia marca. Este es el caso de Wal-Mart y Chedraui, apunta Beissner, quien comenta que en Soriana, Gigante, Grupo Idea y Casa Ley también se comercializan productos de Santa´s Land. Respecto de la competencia con pinos naturales, reconoce que en las personas con mayor poder adquisitivo continuará la preferencia por lo natural, ya que este segmento, apunta, busca el olor a naturaleza. Sin embargo, no se anima a confirmar que la demanda nacional hoy en día de éstos es tres veces superior a los artificiales. Puede ser, manifiesta, "pero habría que ver de qué tipo y tamaño estamos hablando". En este sentido, Beissner señala que son miles los árboles tipo Bonsai -que no rebasan los 30 centímetros de altura- los que se venden al año. En cambio, admite que la participación de la empresa en árboles artificiales con luces integradas o de fibra óptica es baja. Ahí es un terreno donde Tailandia y Vietnam, de acuerdo con Beissner, aún dominan el mercado. La razón es sencilla: en el caso de la fibra óptica implica mucha mano de obra, donde los chinos la venden a precio tan barato que no es posible competir contra ellos. Con 35 años de actividad en México, Beissner menciona que la tendencia de compra en el mercado nacional se mantiene al alza. Ya sea de poliester o PVC, los precios de los árboles de Santa´s Land oscilan entre los 200 y 800 pesos, aunque los hay más económicos y de mayor precio según el tamaño. Por ahora, Janel ya prepara las estrategias del próximo año. Así lo exige el producto, comenta Beissner, incluso, aún no acaba la temporada y ya se están cerrando ventas para el 2007, concluye.





