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A pesar de que para concretar un presupuesto en 2016 de “base cero” se tendría un margen de maniobra de 65% del gasto público, porque el 35% restante está comprometido, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) aseguró que lo mejor será plantear un presupuesto basado en un tope de gastos en función de los ingresos disponibles.

Ello porque el análisis de cada programa gubernamental para fusionarlo o desaparecerlo podría llevarse mucho más tiempo del esperado, ý sería más conveniente determinar límites y darle importancia al desarrollo de la infraestructura.

Lo que es importante es que deje de haber “despilfarro” de recursos públicos que no generan crecimiento en la actividad productiva, afirmó el CEESP en su Análisis Económico Ejecutivo semanal.

A pesar de que en los Pre Criterios Pre Criterios de Política Económica 2016 la Secretaría de Hacienda espera un incremento de 45 mil 581 millones de pesos, no se da información puntual sobre el tema, lo que lleva a inferir que el aumento en los recursos públicos será más por las ganancias que obtendrá por el diferencial de precios de importación del combustible, más que por otros gravámenes como el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agragado (IVA), dijo el centro.

El CEESP, que es dirigido por Luis Foncerrada, señaló que en los Pre Criterios para elaborar el presupuesto del siguiente año se consideran ingresos por 88 mil 686 millones de pesos, inferiores a lo previsto para 2015, principalmente por la baja de 287 mil 326 millones de pesos en los ingresos petroleros.

Para los ingresos no petroleros se espera un aumento de 198 mil 640 millones de pesos, por alza de ingresos tributarios, lo que llegaría a representar el 11.5% del PIB.