"Inseguridad, mayor lastre para negocios"
mario.verdusco@eluniversal.com.mx
Las condiciones de inseguridad pública y la corrupción fueron los dos principales lastres y obstáculos para el crecimiento de las empresas en el país, advirtió el Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP).
De acuerdo con la encuesta mensual que realiza el instituto entre sus agremiados, siete de cada 10 consultados coincidieron en que la inseguridad es el mayor factor que limita la expansión de sus negocios.
El presidente de la Comisión de Análisis Económico del IMCP, Ernesto O’Farril, mencionó que es la primera vez en que un factor es señalado con tan alta proporción entre los participantes.
“Nunca habíamos tenido un indicador que fuera señalado con 69% de las respuestas”, explicó el experto, durante la conferencia mensual del instituto.
El representante del IMCP comentó que a principios del año pasado, los encuestados mencionaban como principales obstáculos para el crecimiento de sus empresas los temas relacionados con la cuestión fiscal.
A mediados de 2014 la tendencia fue hacia la falta de financiamiento y capital, pero que desde septiembre la inseguridad pública repuntó a las primeras menciones y de ahí comenzó una trayectoria ascendente.
A la par de la inseguridad, O’Farril resaltó la creciente preocupación por el fenómeno de corrupción, al grado de ubicarse en segundo lugar.
Otros factores que para los encuestados son obstáculos para el crecimiento de sus empresas fueron la falta de capital, disponibilidad de financiamiento, competencia desleal, altas tasas impositivas y la burocracia.
En medio de este ambiente menos propicio para el crecimiento de las empresas, el Índice Mexicano de Confianza Económica se debilitó al contraerse 1.36 puntos en diciembre y cerrar en 70.03 unidades.
Este indicador del IMCP reflejó que el mayor deterioro se debió a las perspectivas que hay de la economía hacia los próximos seis meses, el cual también mostró un retroceso de 3.33% en el último mes del año pasado.
O’Farril explicó que los datos de diciembre rompieron con la tendencia de recuperación que se observó en los meses recientes.
Lo peor, por venir
Aunque la reforma fiscal entró en vigor el año pasado y algunos de los impactos ya se resintieron entre las personas físicas y morales, será en marzo y abril próximos cuando se resienta el mayor efecto de los cambios tributarios, advirtió el presidente del IMCP, Leobardo Brizuela.
Reconoció que será en el momento en que se realicen las declaraciones anuales y se incorporen las limitaciones a las deducciones, cuando baje la liquidez para los contribuyentes.
Aunque algunos efectos ya fueron absorbidos, explicó que hay algunos impactos que aún no los tienen identificados las personas físicas ni las empresas, por lo que el golpe más duro está por venir.
Agregó que para muchas empresas hubo una mayor afectación por la depreciación del peso mexicano frente al dólar, así como la caída del petróleo, lo que complicó sus estados financieros.
“El 2014 fue un año complicado. La reforma hacendaria afectó a muchos contribuyentes y tuvo un impacto sobre la economía. Por ello se habló de modificar el esquema tributario hacia uno más competitivo, porque hoy no lo somos a escala mundial”, detalló.
Al hacer las declaraciones, las personas físicas y morales tendrán limitaciones para las deducciones, como lo son los consumos en restaurantes y la deducción de automóviles a la parte exenta de los sueldos de los trabajadores, entre otros.