La canciller de Alemania, Angela Merkel, y el presidente de Francia, Francois Hollande, se mostraron hoy aquí favorables a que Grecia permanezca en la zona euro y descartaron las versiones de la salida inminente del país helénico del área.

"Grecia está en la zona euro y debe permanecer en la zona euro" , enfatizaron los gobernantes en rueda de prensa conjunta celebrada en el Palacio del Elíseo en París.

Hollande, quien este viernes recibió a la canciller alemana en su residencia oficial, descartó una salida inminente de Grecia de la zona de la que forman parte 19 países con el euro como moneda común.

"No conozco el escenario que indique una salida de Grecia de la zona euro y el gobierno griego tampoco tiene esa postura" , añadió el presidente de Francia, la segunda economía de la zona euro por detrás de Alemania.

"La postura de Francia es que todo sea hecho para que de lado griego y europeo pueda haber una cohesión más fuerte de la zona" , afirmó.

"La política de Alemania y del resto de países de la zona euro es luchar para que Grecia permanezca en la zona euro y para ello Grecia ha hecho esfuerzos importantes" , subrayó por su parte Merkel, al término del encuentro con Hollande.

"La situación es difícil, sobre todo en el mercado de trabajo, pero empezamos a ver algunos resultados y queremos mantener esa política" , añadió Merkel respeto a la situación en Grecia, que analizan esta semana los ministros de Finanzas europeos en Bruselas, Bélgica.

Merkel afirmó que la situación en Grecia desde la reciente entrada del nuevo gobierno de ultraizquierda en Atenas fue uno de los temas principales de su reunión de este viernes con Hollande en París.

"La cuestión ahora es la prolongación del programa de ayuda. Hay que poder explicar a la gente en otros países de que se trata. Hay muchas cuestiones técnicas que resolver" , comentó Merkel.

"Hay que mejorar las cosas. El Parlamento alemán se pronunciará la próxima semana sobre la cuestión" , añadió la canciller de Alemania, la primera economía de la zona euro.

Los dos gobernantes platicaron además durante su reunión, de casi tres horas que incluyó una comida, de la situación en Ucrania, de los acuerdos de paz, de la reunión del Grupo de los Siete en Alemania de este año y de la próxima cumbre franco-alemana, entre otros temas.