gustavo.delarosa@eluniversal.com.mx

Durante agosto del año en curso el saldo de la cartera vencida en tarjetas de crédito fue de 8 mil 921 millones de pesos, dato que significó un incremento en términos reales de 6.8% real anual, la variación más alta del año y de los últimos 10 meses, en términos absolutos el incumplimiento aumentó 900 millones de pesos en los últimos 12 meses, revelan datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

Uno de cada tres pesos que presta la banca al sector consumo, corresponden al financiamiento a tarjetahabientes, los cuales son el único rubro del consumo que muestra una tendencia ascendente en su cartera vencida, ya que el vencimiento en sectores como la nómina, financiamiento automotriz, personales o para la adquisición de bienes e inmuebles muestran un comportamiento descendente.

Para Andres Audifres analista del grupo financiero Ve por Más, el deterioro de la calidad de la cartera no es alarmante pero hay que darle seguimiento ya que hay riesgos

“Los índices de incumplimiento se encuentran en niveles medianamente estables, los cuales no implican algún riesgo alarmante; sin embargo, es necesario cuidar cada vez más la calidad del otorgamiento crédito en estos instrumentos, para que no crezca la morosidad, ya que en este tipo de préstamos no se cuenta con garantías, además vemos una desaceleración del otorgamiento del crédito en general que revela la cautela con la que los bancos están actuando” comentó

El analista destacó que es importante cuidar el manejo del plástico ya que estacionalmente se acerca el periodo de alto gastos y promociones que resultan atractivos para consumidores.

En cuanto al índice de morosidad (cartera vencida entre cartera vigente) el rubro de préstamo con plástico es de 6.08% durante el octavo mes del año, mientras que en agosto del año la proporción era de 5.6%.

Financian gasto corriente

El uso de la tarjeta como medio de financiamiento se ha intensificado y cada vez más hogares recurren al plástico para solventar sus gastos corrientes y de consumo inmediato, pero ante la lenta recuperación de la economía se observa un deterioro del nivel de incumplimiento, cuando en los primeros meses del año el vencimiento llego a presentar hasta cifras negativas.

Para Carmen Alsivar, analista de la firma Bursamétrica, cada vez más tarjetahabientes recurren al plástico para financiar su consumo corriente ya que aún hay un ajuste en la administración del gasto familiar desde la entrada en vigor de nuevos impuestos.

“Al inicio del año los hogares enfrentaron nuevos impuestos, lo que llevó a las familias a ir adecuando su gasto, al inicio actuaron con moderación pero conforme la economía ha ido mejorando, han utilizado más el plástico”

La experta advirtió que “hay que tener cuidado ya que las elevadas tasas que cobran estos productos y la falta de cultura financiera llevan fácilmente a incurrir en incumplimiento”.

“La banca ha visto en el crédito al consumo una fuente de ingresos importantes, en especial en el uso de tarjetas, ya que el costo de uso, las comisiones, pagos por interés y otros cobros, hacen de este producto uno de los más caros del mercado de servicios financieros que llegan a superar el 40%” añadió.