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La percepción de las familias sobre su situación económica y del país registró en mayo una ligera recuperación, aun cuando todavía se ubica por debajo de los niveles alcanzados el año pasado.

En dicho mes, el Índice de Confianza del Consumidor elaborado de forma conjunta por el Inegi y el Banco de México mostró por cuarta ocasión consecutiva un incremento mensual, ahora de 0.69% con datos desestacionalizados.

El indicador de confianza de los consumidores trata de anticipar el comportamiento de la demanda interna. A pesar de mostrar caídas en términos anuales, éstas son cada vez menores, sugiriendo una estabilización de la confianza de los consumidores, comentó Isaac Velasco, analista económico de banco Ve por Más.

En este sentido, el especialista estimó que se podría comenzar a observar un incremento en el gasto de las familias hacia el tercer trimestre del año, el cual también estará apoyado por mayores remesas. No obstante —adviertió—, la cartera vencida de crédito al consumo comienza a incrementarse, de acuerdo con los últimos datos de Banco de México para abril, lo que representa un riesgo para la recuperación del sector.

Para Alejandro Cervantes, especialista económico de grupo financiero Banorte-Ixe, si bien con cifras originales la confianza continúa cayendo, el avance observado en las cifras ajustadas por estacionalidad de los últimos cuatro meses podría estar mostrando que los consumidores han empezado a proyectar una visión más positiva sobre la economía de México.

Al interior del Índice de Confianza del Consumidor, se registraron aumentos mensuales con cifras ajustadas por estacionalidad en cuatro de los cinco componentes que lo integran, los cuales se refieren a la situación económica actual y esperada tanto de los miembros del hogar, como del país.

En contraste, el indicador que capta posibilidades en el momento actual por parte de los integrantes del hogar para compras de bienes durables reportó una ligera disminución a tasa mensual.

En su serie original, en el quinto mes del año el Índice de Confianza del Consumidor se ubicó en 90.7 puntos (enero de 2003=100), cifra 4.7% inferior al observado en mayo de 2013, cuando fue de 95.2 puntos. Dicho retroceso se debió, principalmente, a los indicadores ligados a la situación del país.

El indicador relacionado a las expectativas de los consumidores con respecto al país en los próximos 12 meses cayó 9.7%, mientras que el que compara la situación actual con la de hace doce meses se contrajo 7.9%. A pesar de mostrar caídas, éstas son cada vez menores, lo cual sugiere que la confianza comienza a estabilizarse, afirmó Velasco.

Con respecto a la expectativa para los próximos 12 meses para las familias, el indicador cayó 1.2%.