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A pesar de la profunda desaceleración económica del país durante el año pasado, la tasa de desempleo en México se mantuvo relativamente estable gracias a que muchos trabajadores hallaron alguna forma de empleo en el sector informal de la economía.

El año pasado se generaron 350 mil 211 nuevos empleos en dicho sector, al pasar de 13 millones 677 mil en el cuarto trimestre de 2012 a 14 millones 27 mil 211 empleados en el último trimestre de 2013, de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), la cifra significó un alza de 2.6% anual y constituyó 27.9% de la población ocupada.

Si a estos 14 millones de empleados le sumamos los 15 millones 534 mil 749 personas que están indirectamente ocupadas de manera informal (servicio doméstico, jornaleros del campo, así como en empresas, gobierno e instituciones) tenemos que el número de trabajadores ocupados de manera informal sumaron en el último trimestre del año pasado 29 millones 561 mil 960 personas, para un avance de 196 mil nuevos empleos (0.7%) respecto a igual periodo de 2012 y representó 58.8% de la población ocupada, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi)

Los 15.5 millones de trabajadores informales adicionales están constituidos por: 2.2 millones que corresponden al servicio doméstico remunerado; 6.3 millones pertenecen al ámbito agropecuario; y otros 7 millones a las empresas, gobierno e instituciones, es decir, los trabajadores subordinados que, aunque trabajan para unidades económicas formales, lo hacen en modalidades que eluden el registro ante la seguridad social.

Para Margarita Chico, directora de comunicación de la empresa trabajando.com, especializada en mercado laboral, este crecimiento de la informalidad se debe, por una parte, a que a las micro, pequeñas y medianas empresas —principales empleadores de este país— les cuesta más trabajo generar plazas formales y por otra parte, los grandes y pequeños empleadores se han mostrado cautelosos para acrecentar su plantilla.

En su opinión, no es momento para evaluar si la reforma laboral genera un ambiente más propicio para la generación de empleos formales, toda vez que las nuevas regulaciones comenzaron a aplicarse este año, por lo que habrá que ver qué sucede en materia de empleo.

En todo caso, advierte la especialista, lo que sí está pesando en materia laboral, son las nuevas medidas en materia fiscal, en particular el aumento al impuesto de nómina, por lo que los empleadores se están mostrando precavidos para abrir nuevas plazas y no será sino hasta ya entrado el año, cuando se fortalezca la reactivación económica cuando posiblemente veremos una mayor generación de empleos, concluyó Margarita Chico.

En el cuarto trimestre de 2013 la población desocupada en el país se situó en 2.4 millones de personas y la tasa de desocupación correspondiente fue de 4.6% de la Población Económicamente Activa, porcentaje menor al de 4.9% de igual trimestre de 2012.