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El mercado de divisas nacional inició la semana con movimiento volátiles, al experimentar el tipo de cambio peso-dólar devaluación de 0.8%, explicado básicamente por la incertidumbre que existe previo a la publicación de la minutas de la reunión de la Reserva Federal, donde se darían señales más contundentes para comenzar el retiro de los estímulos monetarios.

La paridad peso-dólar bajo ese contexto alcanzó un precio de 13.0585 pesos, aunque cabe destacar en las operaciones intradía llegó a valor máximo de 13.070 pesos, y las negociaciones por ventanilla (bancos) se ubicaron en los 13.28 pesos.

El próximo miércoles, la Reserva Federal anunciará las minutas, lo cual podría evidenciar una pronta disminución del masivo plan de inyección de fuertes montos a la economía estadounidense. Además, se pronostica que las minutas, que serán publicadas el miércoles, ofrezcan señales del momento en que el banco central estadounidense reducirá su programa de compra de bonos.

El peso mexicano superó la barrera psicológica de los 13.0 pesos, nivel que no se observaba desde hace dos meses. Los analistas del medio financiero comentaron que una vez superado ese valor, el próximo precio objetivo sería a los 13.15 pesos, el cual sería alcanzado en los siguientes días.

Sin embargo algunos analistas del sector privado anticiparon que de acuerdo a los buenos resultados de sus variables macroeconómicas, el peso mexicano en cualquier momento podría recuperarse.

La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) también siguió ese mismo comportamiento negativo, por lo que su principal indicador del mercado bursátil mexicano registró una pérdida de 1.34%, esto es una diminución 565.45 unidades para establecerse en los 41 mil 484.25 puntos.

Las mayores bajas se concentraron en los títulos de la telefónica América Móvil con 2.79% a 12.92 pesos, la empresa panificadora más grande de Latinoamérica Bimbo con 3.93% a 41.12 pesos y la minera MFrisco con 7.07% a 29.64 pesos.

Los bonos gubernamentales de largo plazo no fueron la excepción, ya que presentaron alzas en sus rendimientos, siguiendo el comportamiento de las tasas de interés del país vecino del norte.

En ese sentido, el bono a plazo de 10 años reportó un avance de 0.15 puntos porcentuales para alcanzar un rendimiento de 6.35%, sin embargo en las primeras negociaciones llegó a una tasa máxima de 6.38%.

tcm