En el mundo virtual los delitos cibernéticos van desde la intrusión de virus informáticos hasta el robo de datos para utilizarlos en actividades fraudulentas, sin embargo, el uso de monedas digitales como botín de los ciberdelincuentes ya forma parte de las estadísticas.

De acuerdo con el informe "Lavado digital" , realizado por investigadores de McAfee, antes del cierre de la compañía de monedas digitales Liberty Reserve, se detectó actividad de este delito por más de seis mil millones de dólares, cifra que podría representar la mayor acusación de lavado de dinero internacional de la historia.

La firma de soluciones de seguridad expuso en un comunicado que los delincuentes virtuales no utilizan sólo a Liberty Reserve para "blanquear" dinero.

En ese sentido, indica que con la proliferación de los servicios de dinero virtual los hackers han visto un terreno fértil para sus fraudes, al también afectar intercambios financieros y desarrollar malware para atacar carteras digitales.

Explica que las monedas virtuales son consideradas como confiables, instantáneas y anónimas, pero sin importar las acciones de protección de las empresas de dinero virtual, los delincuentes detectan en este tipo de servicios una tierra fértil para el lavado de dinero.

De acuerdo con el Banco Central Europeo, la diferencia entre las monedas virtuales y los esquemas financieros electrónicos es que las primeras no están reglamentadas y utilizan dinero ficticio, en tanto que el dinero electrónico utiliza unidades de valores tradicionales y reglamentadas.

En este sentido, la firma de seguridad expuso que la facilidad es uno de los mayores beneficios de las monedas digitales y del dinero electrónico, debido a que para adquirirlas, aunque a veces se requiere de un proceso de registro, otras tantas solo basta con proporcionar fondos monetarios.

Aunque han existido intentos para eliminar los servicios de monedas digitales, se ha observado que los cibercriminales transfieren sus negocios a otros lugares, sin embargo, las autoridades en diversas partes del mundo trabajan para arrestar a las personas que operan en estas plataformas.

tcm