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El momento final de la discusión del Paquete Económico puede ser también la más complicada, pues una vez que ya se tienen los cálculos sobre los ingresos del gobierno sigue la tarea de repartirlos de manera que todos alcancen los recursos necesarios para cumplir con sus tareas.

Es aquí donde, a decir de Ernesto Revilla, aparece el último villano en Hacienda, Fernando Galindo, subsecretario de Egresos, pues este personaje muchas veces debe decir no a las múltiples peticiones que recibe.

“La parte de egresos es un gran reto porque no es tarea menor asegurarse que cada peso esté bien ejercido y gastado”, dice Revilla.

El funcionario reconoce que Fernando Galindo, en quien recae esa última responsabilidad es un funcionario con mucha trayectoria, pues desde el gobierno del Estado de México tiene la práctica de negociar y trabajar con presupuestos.

Aunque es el más joven del grupo de la Secretaría de Hacienda, dicen que esa es una gran ventaja para él, pues tiene más energía, que en tiempo de negociación es fundamental.

“La negociación de un presupuesto es una de las experiencias legislativas más complejas. Ese es el papel de una democracia; requiere mucho diálogo e interacción”, comenta Revilla.

Diversos analistas sugieren que en la reforma hacendaria se plantee un mejor ejercicio del gasto público, de mayor calidad y más transparente.

Aun así, para el economista en jefe de Hacienda, Ernesto Revilla este año se concretarán cambios importantes para impulsar un mayor crecimiento del PIB nacional y más desarrollo.

Será el 15 de noviembre, fecha límite para aprobar el Presupuesto de Egresos de la Federación y saber si entonces la Secretaría de Hacienda cumplió con sus expectativas o tendrá que postergar para un mejor año los cambios en materia hacendaria.