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El presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope-Servytur), Gerardo López Becerra, manifestó su inconformidad por la sanción que realizó la Profeco a la empresa Bimbo.

“No vemos nada censurable, nos parece inaceptable que la Profeco se ocupe de estos asuntos que perjudican al pequeño comercio y desatienda asuntos que son verdaderamente graves”, enfatizó el titular de la Canacope-Servytur.

López Becerra manifestó su preocupación al considerar que la normatividad de la Profeco es obsoleta. Al mismo tiempo, dijo que actúa con discrecionalidad y gasta su pólvora en “infiernitos”.

“Estamos preocupados porque ésta acción represente la continuidad de políticas erróneas practicadas por la administración anterior", expresó el directivo.

En conferencia de prensa, pidió a la procuraduría que reforme su marco jurídico para poder sancionar al comercio informal, ya que consideró que es en este sector donde se comercializan productos con publicidad engañosa que dañan la economía de las familias mexicanas.

Cabe resaltar, que el pasado 5 de julio, la Profeco inmovilizó 20 mil 772 envases de pan dulce “roles de canela y glaseados” que fabrica la panificadora por proporcionar supuestamente publicidad engañosa a sus clientes.

López Becerra reveló que este producto se vende al día de hoy en más de 60 mil tiendas de abarrotes, misceláneas y cremerias de la ciudad, y dijo que la firma Bimbo como muchas otras empresas mayoristas realizan este tipo de promociones sin haber sido sancionadas.

Por su parte, Alfredo Castillo Cervantes, titular la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), enfatizó que con la inmovilización del producto no se afectó al pequeño comercio, ya que la acción obedeció a que la promoción que se indicaba en el empaque era engañosa.

“El objetivo de las promociones es incidir en la decisión de compra del consumidor y en este caso la información al no ser veraz, vulnera el derecho a la información de los consumidores y afecta directamente en su patrimonio”, comentó Castillo Cervantes, de Profeco.

Aseguró que la inmovilización de ninguna manera limitó la decisión de compra o de sustitución por otro producto similar por parte del consumidor; por lo que el pequeño comerciante no se afectó por este operativo.

Castillo Cervantes reveló el mayor número de inmovilizaciones se realizaron directamente en la fábrica de Bimbo, solo un número muy reducido se inmovilizó en tiendas de conveniencia o pequeñas.