julian.sanchez@eluniversal.com.mx  

El índice de pobreza extrema se ha mantenido en el país, aunque el gobierno registra aumentos considerables en el gasto social, y una muestra es que las familias más pobres perciben un ingreso mensual aproximado de 2 mil 300 pesos, según un estudio del Centro de Análisis Multidisciplinario (CAM) de la Facultad de Economía de la UNAM.

Los hogares mexicanos, resalta, dedican la mayor parte del ingreso a la compra de alimentos, bebidas y tabaco, transporte, educación y esparcimiento.

Paralelamente al hecho de que de 2006 a 2008, entre el cambio del gobierno federal y el inicio de la crisis, ese gasto se contrajo 0.2%, y para el periodo 2008-2010 el deterioro en el gasto para alimentos fue de 3% y en lo que va de la presente administración no hay crecimiento económico, ni embate a la pobreza, pero si muchas declaraciones a granel. En el ámbito económico, 2013 es un año perdido, se establece en el análisis.

David Lozano Tovar, integrante del CAM, señaló que se debe considerar, por ejemplo, que hace 40 años había 31 millones de pobres y a la fecha son más de 53 millones en esa condición, lo cual refleja un fracaso de la política asistencialista.

Más pobres

“En el tiempo antes citado, se ha dado aumento al presupuesto de combate a la pobreza en más de 100%, y hay más pobres que nunca”, sostuvo Lozano Tovar, quien calificó de inaceptables las cifras de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos en los Hogares del Inegi, pues la pobreza es aún más lamentables que lo que ésta señala.

“No corresponden a la situación de alzas de precios en el país, no corresponde a los niveles de ingreso ni situación de empleo. No comprenden cual es la metodología”, indicó.

El Inegi reconoció que durante los seis años que gobernó el presidente Felipe Calderón Hinojosa, el ingreso que percibieron los hogares mexicanos tuvo pérdidas, que mostraron una caída en la capacidad de compra de bienes y servicios durante un periodo en el que se presentó una de las mayores crisis económicas a escala mundial en ocho décadas.