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Después de que la Secretaría de Hacienda corrigiera significativamente su expectativa de crecimiento para 2013 de 3.1% a solo 1.8%, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) indicó que dicho indicador generó un mayor grado de incertidumbre que ha llevado a las expectativas de todos los indicadores macro a la baja.

Por lo que ahora se anticipa que solo habrá la posibilidad de generar 450 mil nuevos empleos formales con un ritmo de crecimiento económico menor a 2.0%.

En este contexto, el CEESP ajustó su pronóstico de crecimiento para 2013 a la baja para ubicarlo en 1.75%.

Detrás de estas estimaciones, asegura, aún existen señales de que la actividad productiva del país será mejor en la segunda mitad del año. Para crecer 1.75% será necesario un avance promedio trimestral de 2.5% en los dos trimestres siguientes.

“Las cifras recientes sobre el comportamiento de la balanza comercial de julio dan señales de una modesta mejora, lo que puede ser indicio de una mayor actividad productiva en los siguientes meses”, subrayó el CEESP.

Destacó que hay la necesidad de impulsar la actividad interna del país, en lo cual ayudará la aprobación de las reformas estructurales, pero será mucho más importante que el estado de derecho sea la principal variable, toda vez que es fundamental un ambiente de confianza para que la inversión fluya de una manera constante.

Para poder cambiar el panorama que interfiere en el crecimiento del país, el CEESP indicó que la inversión será el principal motor de crecimiento, ya que las expectativas apuntan hacia un mejor desempeño de la economía mexicana en la segunda mitad del presente año.

No obstante, enfatiza el centro de análisis del sector privado que la tasa de crecimiento del PIB será mucho más baja de lo que se había previsto a inicios del año.