Una popular cadena de comida rápida en Francia comenzó a servir sólo platillos de la dieta halal en sus 22 establecimientos con el fin de atraer a la gran población musulmana del país.

En los restaurantes de la cadena Quick hay un certificado pegado en el muro que proclama que su carne proviene de reses sacrificadas según la ley islámica.

Además, la nueva modalidad de Quick retiró el tocino de las hamburguesas. El tradicional tocino fue reemplazado por pavo ahumado.

Entre los políticos de izquierda y derecha han surgido críticas a la medida desde todo ángulo concebible. Algunos preguntan por qué la comida halal debe ser impuesta a la población general, mientras que a otros les preocupa que Quick promueva la segregación más que la aceptación de la comunidad musulmana.

La carne halal debe provenir de reses que han sido sacrificadas por un corte en la yugular y luego colgadas hasta desangrarse por completo.

Hedi Namane, un técnico de 29 años que llevó a su hijo de 2 años a comer una hamburguesa halal, dijo que le preocupa que la decisión de Quick sea un motivo para los racistas.

''Hay mucha gente que se queja por las mezquitas, por los productos halal y por esto y por aquello'', dijo.

Namane no probó las hamburguesas el miércoles cuando comenzaron a servirse. De manera un tanto extraña, la cadena lanzó la hamburguesa en medio del Ramadán, un mes en el que los musulmanes devotos ayunan del amanecer al anochecer.

Marine Le Pen, hija del icono de extrema derecha Jean-Marie Le Pen, dijo que la decisión de Quick era un ''escándalo''.

''No soy musulmana, no quiero que se imponga esto'', dijo Le Pen a la radiodifusora Europe-1.
Kentucky Fried Chicken dice que ha servido pollo halal en sus locales franceses durante 19 años.
En Francia se calcula que hay cinco millones de musulmanes.

cvtp