El experto que renovó el concepto del corte

REVOLUCIONARIAS. Las mujeres ya no se conforman con sólo planchar su cabello; la idea es elegir un corte que les permita ser mucho más versátiles. (Foto: RICARDO HERNÁNDEZ EL UNIVERSAL )
claudia.ramirez@eluniversal.com.mx
Hace casi tres décadas, el estilista francés Patrice Mulard llegó a México y, respaldado por una sólida trayectoria profesional y varios premios bajo el brazo, comenzó a trabajar en nuestro país, revolucionando el concepto de peluquería que se tenía en ese entonces.
Hoy, Mulard, quien vive actualmente en Guadalajara, Jalisco, es dueño de una de las cadenas de salones de belleza y escuelas de corte más famosas e importantes de la República.
De visita en la ciudad de México con motivo de la celebración del décimo aniversario de su salón de belleza ubicado en la colonia Polanco, Patrice Mulard habló con KIOSKO.
Destino marcado
No fue una casualidad que Patrice Mulard quisiera ser estilista, pues su mamá también lo era y, desde muy pequeño cuando la veía trabajar, quiso formar parte de ese mundo.
También fue su madre quien le dio el apoyo que necesitaba, llevándolo a cursos y seminarios, con los que comenzó su preparación. Cuando tenía 18 años de edad, ya formaba parte de un equipo internacional de estilistas franceses.
“Cuando llegué a México, tenía muy claro que lo iba a hacer. Trabajé durante un año en el Distrito Federal, pero no me gustó, porque me parecía una ciudad muy grande y complicada, por esta razón me fui a Guadalajara.
“De ese tiempo a la fecha, muchas cosas han cambiado. Anteriormente, las clientas tenían que conformarse con lo que el estilista les hiciera en el cabello; hoy, en cambio, los profesionales que trabajan en México están a la altura de los mejores del mundo, porque ahora se tiene la posibilidad de conocer las tendencias globales y de adaptarlas a las necesidades de las clientas mexicanas, quienes cada día son más exigentes y están más informadas”, explica.
Nace una idea
El estilista también señala que, en otros tiempos, las personas que se dedicaban al cuidado y la belleza de las cabelleras tenían muy pocas posibilidades para prepararse y actualizarse, debido a que había muy pocas escuelas de estilismo y las carreras eran demasiado cortas. Esa fue la causa principal que lo motivó a abrir su propia escuela.
“Afortunadamente, en nuestros días se toma muy en serio la carrera de estilista y quienes la estudian no sólo saben cortar bien el cabello, sino también tienen conocimientos de teoría del color y saben perfectamente qué es lo más le conviene a sus clientas.
“También cambió el concepto del salón de belleza, pues ahora no sólo se corta y pinta el cabello, sino también se le dan tratamientos para hidratarlo y fortalecerlo”, explica el estilista, quien además de tener 15 estéticas ha abierto 10 academias donde ha preparado a varias generaciones de profesionales.
La evolución
Según Patrice Mulard, creador de la marca Patrice Beauté -línea de productos capilares que está hecha a base de ingredientes naturales y del mar-, las mujeres de hoy ya no se conforman con arreglar su cabello sólo planchándolo, sino que quieren tener otras opciones que las hagan lucir mucho más bellas y con un toque de glamour.
“En estos momentos, muchas clientas nos piden rizos, pero no quieren que sea un estilo que se vea siempre igual, saben que su cabello es un accesorio natural, el cual pueden cambiar cada día de la semana, como la ropa o la joyería, y así ser mucho más versátiles.
“Hoy en día, cuando una mujer llega al salón de belleza, espera encontrarse con un asesor más que con un cortador de cabello; quiere que la orienten sobre las tendencias y sobre lo que mejor le convenga, de acuerdo la forma de cara, tipo de cuerpo, tono de piel y, además, del tiempo que se tenga para arreglarlo, cuidarlo, teñirlo, etcétera”, finalizó.





