"Tengo amigas muy buenas. Cada una es diferente y especial; siguiendo el consejo de mi papá, procuro no ´poner todos los huevos en la misma canasta´ y no tener sólo una". Blanca, 18 años.

"Mi mejor amiga me alienta en todas las locuras que se me ocurren y yo también la apoyo constantemente. A su lado me transformo; ella sabe cosas de mi vida que nadie más conoce ni conocerá. Me anima a dejar salir a mi niña interior. Pasamos horas platicando y riéndonos de todas las tonterías que se nos ocurren. También nos vamos de reven; juntas hemos pasado horas de diversión y momentos inolvidables". Carmina, 20 años.

¿Has oído aquel dicho que dice: Los amigos se cuentan con los dedos de una mano, y ¡hasta te sobran dedos!? La verdad es que pocas personas pueden decir que tienen amigos de verdad, así que si tú los tienes, ¡cuídalos mucho!

Las amistades juegan un papel sumamente importante en nuestras vidas; son nuestros confidentes, cómplices, hermanos, y algunas veces, hasta jueces o padres. Las parejas van y vienen, nos llenan de ilusiones, pero no siempre nos dan consuelo y, ocasionalmente, en lugar de apoyo encontramos en ellas reclamos porque no nos interesamos en sus asuntos.

Los amigos en cambio siempre estarán contigo y te aceptan y soportan tal y como eres: enojona, gritona, chistosa, tímido o sarcástico.

Amor vs. amistad

Casi siempre damos en nuestra vida el sitio principal al amor y después a la amistad; quizá debería ser al revés ¿no crees?

Lo que encontramos en un confidente es una real identificación con él y ese algo que hace "click", formado de honestidad, inteligencia, bondad, valentía, buen humor, apertura al cambio, todo lo que construye puentes emocionales fuertes y duraderos.

Aun así, mantener sana una amistad a través de los años es complicado, pues todos vamos cambiando y nuestros intereses también.

De cómo mantener una amistad sin morir en el intento

¿Qué qué hay que hacer para mantener fresca y viva una amistad? Repasando libros de expertos en relaciones humanas encontramos algunos tips que de seguro te ayudarán a mantener esos importantes vínculos en plena forma:

Da de ti mismo Tienes que ser capaz de ayudar sin esperar nada a cambio y sin buscar tu beneficio, es decir, ¡fuera egoísmo! Eso sí, no dejes que abusen de ti.

Reconoce tus errores Cuando cometas una equivocación acéptala y discúlpate sin tantos rollos.

Aunque en ocasiones la verdad es dolorosa, lo mejor es hablar con honestidad y decir las cosas de frente.

No celes a tus amistades No limites ni trates de controlar a tus amigos; la libertad es un ingrediente básico en cualquier relación. Si tu mejor amiga quiere salir con la que fue compañera de la primaria un fin, y hasta se queda a dormir con ella, piensa que no te está abandonando, simplemente está enriqueciendo su vida y su experiencia con alguien más. Después habrá más cosas que compartir. Los celos denotan inseguridad y asfixian, ¡recúerdalo!

No dependas de lo que diga tu amigo Toma en cuenta sus opiniones pero mantén tu individualidad y toma tus propias decisiones.

Sé responsable de ti misma y no el clon de otra persona.