Enlace nupcial de Paola Petricioli y David Alí

. (Foto: EL UNIVERSAL )
Inolvidable, resultó el fin de semana en que Paola Petricioli Bernal y David Alí Loaeza se unieron en matrimonio civil y religioso. Más de 700 invitados acudieron al llamado, en Cuernavaca, donde compartieron la dicha de los enamorados. A lo largo del festejo, parientes y amigos de la pareja participaron también de un torneo de golf, fuegos artificiales y una velada estilo árabe donde odaliscas animaron el ambiente con sus danzas. El inicio de la celebración fue en el Club de Golf Tabachines, donde numerosos invitados mostraron sus habilidades en el juego. Por la noche se efectuó la boda civil, en el Foyer del Teatro Kabuki del Sumiya. En presencia de la juez Graciela Nequis Chávez, Paola y David se comprometieron a formar una familia. En el acta correspondiente estamparon su firma como testigos: Joaquín Díaz González, Luis Segura Peralta, Guillermo y Gabriela Petricioli Bernal; Juan Carlos Legarreta, Leticia Butchart de Alí, Kurt Nugent, Anuar Alí Butchart, Yolanda Sayes de Tomasi, María Guadalupe Bárcenas, Dalila Alí de Nugent y Alejandro Petricioli Bernal. Los padres de los novios: Guillermo Petricioli Mercado, Eduardo Alí Butchart y Olga Loaeza Romero atestiguaron la unión. Después de felicitar a Paola y David, los invitados degustaron rica cena, amenizada por la música de los violines de la orquesta Artístico-Musicales. El menú consistió en crepas de frijol con queso, crema de huitlacoche, medallones de filete acompañados de salsa de tres chiles secos y salsa grecot, y para rematar, postres de diferentes figuras rellenos de mousse de zapote, pistache y chocolate. A esto siguió una noche de casino, donde hubo los tradicionales juegos y concursos organizados especialmente para la ocasión. El tan esperado día, la guapa novia llegó a bordo de un auto de colección 1928, color arena. Acompañada de su padre caminó hasta uno de los jardines de la Hacienda de San Carlos, donde se realizó la ceremonia de ensueño. Ahí la esperaba David, además de las madrinas: Alejandrina Petricioli, de ramo; Jaqueline Alí de Martínez, de lazo; Marlene Alí de Ramírez, de arras, y Renata Petricioli de Roca, de anillos. Los pajecitos fueron Santiago, Manuel y Juan Pablo Martínez Alí, y Renata Roca Petricioli. Fue Monseñor David Romo Guillén quien se encargó de impartir la bendición nupcial desde un altar montado especialmente, conformado por un bello retablo indoportugués del siglo XVIII con apliques de plata colonial peruana y un Cristo de estilo ?Naban Jin? del siglo XVII, sin faltar la imagen de la Virgen de Guadalupe a la cual Paola le ofreció su ramo. La ceremonia religiosa contó con la presencia de la soprano Guadalupe Millán, acompañada por la Camerata México Concertum Musicum, solistas, coro y orquesta, quienes entonaron la Misa de Coronación y el Aleluya, de Mozart; el Ave María de Schubert; y Va, penseiro, sull ali adorate de la ópera Nabuco de Verdi, entre otras selecciones. Al compás de la Marcha Nupcial, los recién casados caminaron hasta una explanada donde los invitados los rodearon de cariño y los mejores deseos. Más tarde, en el patio principal de la hacienda se desarrolló la recepción. Las mesas fueron decoradas con esculturas de hielo, cubiertas con finas rebanadas de jícama, pepino y zanahoria. Para refrescarse, los asistentes fueron halagados con toda clase de cocteles; así como ricos antojitos miniatura como quesadillitas, taquitos de chorizo y tostaditas con guacamole. Acompañados por un mariachi y cobijados por la canción ?Novia mía?, la pareja llegó al lugar donde recibieron toda clase de parabienes. El ambiente que puso la orquesta ?Láser?, fue el marco donde se sirvió la cena, que consistió en capricho de dos salmones con vinagreta de mango y mostaza, bisquet de morillas, pechuga de pollo envuelta en phyllo rellena de queso de cabra y tomates deshidratados con holandesa al pesto y barra de postres. Y de repente, el cielo se iluminó con un espectáculo de fuegos artificiales que formaron bellas imágenes. Sin salir del asombro, las sorpresas continuaron con el inesperado arribo de un helicóptero, de donde descendió un grupo de bailarinas ataviadas con trajes de odaliscas que acompañadas por un tambor, condujeron a los asistentes al interior de una carpa, montada como discoteque y decorada a la usanza árabe, en blanco y oro. En las pequeñas mesas del ?harem? se colocaron largos manteles y al centro, fuentes colmadas de racimos de uvas. En las paredes y en el piso colgaron tapetes de exquisitos diseños; del techo pendían gasas blancas y en las paredes, espadas. La fiesta, donde no faltó la música disco, serpentinas y confeti, se prolongó hasta el amanecer. A la mañana siguiente se dispuso de un desayuno tipo buffet con barbacoa, tacos al pastor y churros rellenos, y amenizado por un grupo de música cubana. Antes de salir en viaje de luna de miel, Paola y David disfrutaron de una tarde bohemia, donde un trío y el cantante Luis Méndez, interpretaron románticas melodías, especialmente para la joven pareja. En estos momentos, Paola y David disfrutan de su felicidad recorriendo Australia, Thailandia, Singapur, Hong Kong, India, Sudáfrica, Egipto, Líbano, Tierra Santa, Francia. (A.Y.) FESTEJO Celebrado en el Club de Golf Tabachines y en la Hacienda de San Carlos Amenizada por la música de los violines de la orquesta Artístico-Musicales, mariachis, un grupo de música cubana y un trío, entre otros Incluyó un torneo de golf, fuegos artificiales y una velada estilo árabe, así como una noche de casino La ceremonia religiosa contó con la presencia de la soprano Guadalupe Millán, acompañada por la Camerata México Concertum Musicum Una carpa fue montada como discoteca y decorada a la usanza árabe Odaliscas animaron el ambiente con sus danzas Los novios disfrutan de su luna de miel por Australia, Thailandia, Singapur, Hong Kong, India, Sudáfrica, Egipto, Líbano, Tierra Santa y Francia





