Ex modelo, empresaria, esposa y recientemente madre, Lucía Miranda es una mujer que dice sentirse afortunada y agradecida con la vida. Si bien ha tenido momentos difíciles, como la muerte de su primer esposo Hugo López, también ha tenido momentos de gran dicha, como la que vive ahora con su hija Luna y su actual esposo, Diego de la Torre. Lucía Miranda, destacada mujer dentro del mundo de la moda en México y Argentina, su país natal, tiene una trayectoria de más de 20 años; es reconocida en el espectáculo por su trabajo como diseñadora de imagen y representante de artistas. Su vida ha sido de intenso trabajo y de constantes retos, pero en este momento, declara, se enfrenta al reto más grande e importante: educar a su pequeña Luna, de sólo cuatro meses de edad, quien le ha abierto una nueva perspectiva por la vida. Y al hablar de ese pequeño "pedacito de cielo" su expresión sólo puede ser el de una orgullosa madre.

Lucía M. Castañeda Juárez Amable, sencilla y con la elegancia que la caracteriza, Lucía nos recibió en su casa ubicada en una zona exclusiva de la ciudad de México. Dos óleos de gran formato del joven artista mexicano Cortázar destacan en la amplia sala, así como una pintura de la entrevistada y fotos de familiares y amigos. Su familia en México está integrada además de su hija y esposo, de su padre Jóse Humberto y de "Mike", un pequeño french puddle blanco de ocho años de edad, regalo del cantante Luis Miguel.

"Antes de la llegada de Luna, 'Mike' era el consentido, ahora él cuida de la pequeña".

Y con su característico acento argentino comentó: "Mi hija llegó en el momento justo. Luna es adoptiva, nació el 15 de abril y llegó a casa el 8 de mayo, dos días antes del Día de las Madres. Desde luego el festejo fue muy especial. 'La Nena' llegó a iluminar mi vida, la de mi esposo y la de mi familia, algunos vinieron de Argentina sólo para conocerla. No soy su madre biológica, pero para mí y los míos eso es lo de menos. Es mi hija y la felicidad es increíble. Mi padre está encantado con su nieta.

"Luna es algo así como un milagro, me siento con mucha energía para amarla y darle lo mejor de mí. "Desde antes de mi primer matrimonio, mi ilusión era tener una familia numerosa, pero no pudo ser así; tuve cuatro embarazos, pero ninguno se logró. Me sometí a diversos tratamientos, en total 10 in vitro sin resultado. Nunca me di por vencida porque siempre que fracasaba: el próximo sí será. Finalmente Diego y yo optamos por otro camino. Nunca perdí la esperanza de ser madre. "Soy una persona muy terca, considero que si algo deseas en la vida debes luchar y hacer todo lo posible por alcanzarlo, la tenacidad es importante y yo siempre la he puesto en práctica en lo personal y lo profesional. Si algo me propongo intento, lucho por ello. Sí, también hay fracasos, pero no hay que lamentarse y, sobre todo, nunca perder el optimismo."

¿Nunca hay tristezas?

Por su puesto, en la vida de todos. En ocasiones me pongo triste y hasta lloro, pero un rato. Luego me pongo alegre. Trato de ser positiva y de apartarme de la gente negativa, de la que siempre se lamenta y la que critica.

Cambió la carrera de Derecho por el modelaje

De reina de belleza a modelo. "Mis incios se remontan a 1978. Participé en el certamen de belleza "Reina del Atlántico en mi país, donde obtuve el primer lugar, un año después en Miss Argentina, con un segundo lugar, y al día siguiente estaba modelando un vestido de novia en un programa de televisión. A partir de entonces me inicié como modelo y despúes de constantes viajes decidí abandonar la carrera de Derecho de la que cursaba el tercer año, lo cual afectó mucho a mis padres pero comprendieron que el modelaje era lo mío". Ahora mi padre es mi asesor financiero.

Lucía ha sido asesora de imagen de artistas como Yolandra Andrade, Laura Flores, Thalía, René Casados, Rebeca de Alba e Imanol, también ha coordinado el vestuario de diversas telenovelas. Su trabajo más reciente fue diseñar la ropa para la obra de teatro "La libélula" que protagonizan Daniela Romo y Héctor Suárez. Actualmente tiene una empresa dedicada a las representaciones de artistas, trabajo que alterna con la coordinación de desfiles de modas.

Retomando el tema de sus inicios, explica que empezó a trabajar para reconocidos diseñadores argentinos y para diferentes casas internacionales. En un viaje que realizó a París tuvo la oportunidad de conocer a Pierre Cardin y de desfilar para su casa de modas. "Tuve ofertas en el extranjero, pero nunca fue mi idea dejar mi país y mi familia. Pero, cuando vine a México las cosas cambiaron".

Mi destino fue conocer a un argentino, en México

"Siempre he creído en el destino, y el mío fue conocer no uno sino dos argentinos en México. Nunca imagine venir a este país y mucho menos que aquí me enamoraría.

"En 1986 trabajaba en un programa de TV, como conductora y productora de modas. Durante el "Mundial México 86" vine a realizar una serie de reportajes acerca de la participación de la mujer en el mundial. "Me entrevisté con Hugo López, un argentino radicado en México desde hacia 24 años, El era presidente de Televisa en Argentina, socio de Emilio Azcárraga y representante del cantante Luis Miguel, en ese momento Hugo me proporcionó el equipo y el personal para mi trabajo, el cual concluyó y regresé a mi país. Pero cuando la selección argentina calificó para la final me enviaron nuevamente. En esta seguna visita el flechazo se dio entre Hugo y yo, y después de un año de ir y venir nos casamos; desde entonces radico en México.

"Nuestra relación terminó seis años después, cuando falleció de cáncer en el colon. Hugo era una persona excepcional, con mucho carisma y muy inteligente, de él aprendí su sencillez, su trato amable con los demás y su optimismo.

"Durante el tiempo que estuve casada seguí trabajando como modelo para diversas firmas nacionales y participando, con segmentos de moda, en algunos programas de televisión al lado de Ricardo Rocha, Rebeca de Alba y Juan Calderón, entre otros. En 1990 decidí dejar el trabajo para dedicarme a mi esposo y al hogar. Así que cuando enviudé mi intención era regresar a mi país. Pero Emilio Azcárraga Milmo me ofreció empleo en su empresa y durante cuatro años me desempeñé como directora de imagen y coordinadora general de vestuario. No fue un trabajo fácil, porque no todas las "estrellas" aceptan recomendaciones o asesoría respecto a su imagen. Recuerdo que una actriz que hacía una telenovela de época usaba ropa de los 50, 60 70, y 80, mientras que el tema se refería a los años 20. Hablé con ella, pero no le importó, ella usó su costoso vestuario comprado en Europa exclusivamente para hacerla lucir. Y así lo hizo.

"Pero también hay quienes se acercan a mí para asesorarse acerca de su vestuario o maquillaje, como Rebeca de Alba, quien además de ser una entrañable amiga, es una persona que acepta mis consejos."

Lucía ha preparado a varias modelos que han destacado, como Elsa Benítez, y asegura: "Me considero con muy buen ojo para saber quién tiene perspectivas y quién no.

"¿En que me basó? En el porte, la figura, la estatura es importante, el carisma, la personalidad, influyen muchas cosas."

Un nuevo ciclo en mi vida

Lucía asegura no ser superticiosa, pero nunca pasa debajo de una escalera, tiene dos pasatiempos favoritos: viajar y jugar paddle, "así conocí a mi actual esposo Diego de la Torre, ex campeón nacional de paddle. Tengo cinco años con Diego y ha sido una relación formidable.

"Ahora Diego se encuentra en Argentina, ha recibido una formidable propuesta de trabajo por lo que en dos meses regresaremos a nuestro país. "Pienso que la vida se vive por ciclos y el mío en México ha concluido; ahora empiezo uno nuevo al lado de mi familia, y es tiempo de regresar a reencontrarme con mis raíces, con mi familia. ¿La decisión de regresar fue fácil?

Creo que las cosas en la vida suceden en el justo momento. Cuando las cosas tienen que llegar llegan y llegó el momento de recomenzar.

"No es ni será fácil dejar lo que tengo, y no me refiero a lo material. Soy una persona que no se aferra a las cosas. Pienso en los 12 años que viví aquí, tengo grandes amigos y muchos recuerdos. México me dio una hija y es mi segundo hogar. "Tengo una casa preciosa pero la tengo que dejar. Me llevaré sólo algunas cosas. Respecto de la empresa, seguiré como socia y creo que tendré que venir algunas veces. Los últimos 12 años he viajado a Argentina de cuatro o cinco veces al año. Respecto de sus planes para el futuro aseguró: "Yo no programo y no es que no me importe el futuro y menos ahora que tengo una hija, debo pensar en ella, pero, me importa más el presente, valorar y vivir cada momento".