La cocina mexicana, declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, está más viva que hace 300 años, aseguró el cocinero Aquiles Chávez, invitado al festival Visiones de México que se realiza en la capital colombiana.

El también director y presentador del programa televisivo "El toque de Aquiles", considerado uno de los mejores chefs de México, dijo a Notimex que la cocina mexicana es Patrimonio de la Humanidad por el carácter cultural que tiene desde la época prehispánica.

"La cocina mexicana está tan viva como hace 300 años, como hace 100 y hoy sigue viva. La cocina mexicana no europea o hispánica, es una fusión de estos dos continentes", explicó.

El hecho de que la cocina mexicana haya sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), agregó Chávez, es "maravilloso porque nos garantiza una mayor difusión".

"La comida mexicana a todo el mundo le gusta y finalmente está en boca de todo el mundo, textual y literalmente. Cuando uno le dice a la gente que soy cocinero y hago cocina mexicana, les parece increíble", señaló.

El artista culinario, sin embargo, reconoció que le preocupa que en muchas partes del mundo se confunda la comida "Tex-mex" con la verdadera gastronomía mexicana.

"La gente confunde la comida mexicana con la de Tex-mex, burritos o nachos, y eso no es comida mexicana. Comida es otra cosa, porque está basada en maíz, frijol y chile", aclaró.

Insistió que es muy difícil definir la cocina mexicana porque hay 31 estados y el Distrito Federal, y en cada una de estas regiones "hay platos diferentes, con cualquier cantidad de variedad con mucho sabor, color, pero sobre todo con técnica y tradición".

El también dueño del restaurante "Lo Cocina de Autor", en la ciudad de Villahermosa, sostuvo que la técnica de la cocina mexicana "es impresionante para el manejo del mole, frijol, fritos, chile y salsas".

Chávez reconoció además que la gastronomía de los otros países de América Latina "también está llena de ingredientes, tiene cualquier cantidad de sabores y colores, tiene su propio estilo y formas, pero le falta difusión" a nivel mundial.

"El día que nosotros como latinoamericanos nos sintamos muy orgullosos y no nos dé vergüenza de llevar un extranjero a comer arepas y no a un restaurante francés, que es sinónimo de bueno, ese día nuestra cocina tomará otra dimensión", concluyó el chef.

sc