aviso-oportuno.com.mx

Suscríbase por internet o llame al 5237-0800




La diferencia entre oír y escuchar

El Universal
Jueves 13 de diciembre de 2001

A veces creo que mi hijo no oye; lo llevé con el pediatra y le hizo una pequeña prueba haciendo sonidos a espaldas del niño y él volteaba hacia el ruido. Sin embargo, muchas veces cuando le digo algo parece que no me oye.

Quizá su hijo sí oye, pero no escucha, ya que existe una diferencia entre estos dos conceptos.

Lo más adecuado es llevar al niño con un especialista para que le realicen una "audiometría" y descartar algún problema físico, como la sordera.

Hay personas que no tienen ningún problema físico a nivel oído, ellas oyen hasta los ruidos más lejanos o tenues, sin embargo no los comprenden, porque no pueden o no saben escuchar.

Los especialistas dicen que los dos componentes más importantes de la escucha son atención y entendimiento. Estos dos componentes básicos juntos forman un ciclo de reforzamiento propio, pues si un individuo no pone atención, no puede recibir el mensaje, no comprende.

Un bebé recién nacido todavía no distingue los ruidos de su entorno, requiere de las herramientas evolutivas que son fundamentales para escuchar. Poco a poco es capaz de identificar de entre todos los demás sonidos del ambiente, la voz reconfortante de mamá o papá. En este momento comienza "la escucha". Conforme va madurando va comprendiendo mejor y estando más atento.

Michelle Lattman y Antoinette Seandal, especialistas en la materia, dicen en uno de sus libros que "aprender a escuchar" es una parte esencial para aprender a hablar. Otros especialistas opinan que hay que enseñar a los niños, desde muy pequeños a escuchar, ya que es la base del desarrollo del lenguaje, también es la base del aprendizaje y la comprensión.

Los padres pueden ayudar a sus hijos a desarrollar estas habilidades de escucha, hablándoles todo el tiempo, con narraciones o lectura de cuentos, cantando canciones, diciendo rimas, gesticulando y con contacto físico.

Diariamente los padres deben platicar con sus hijos, escuchándolos con toda su atención, sin estar volteando a otro lado, estableciendo contacto con su mirada, con una actitud corporal que diga que están atentos a lo que platica.

Enseñándolos a reflexionar, siempre haciéndoles preguntas sobre los cuentos, o pensando que significa cierta palabra de una canción o rima. De esta forma se adquiere destreza de pensamiento.

Dediquen un tiempo especial para conversar, sin interrupciones, en donde no haya distractores, como por ejemplo ruidos fuertes, el televisor encendido, etcétera, pues no hay nada más efectivo para romper una conversación y por lo tanto la comunicación.

Otra forma es que adivine los sonidos que emiten los animales, primero el niño adivina, pero después pueden invertir los papeles. El niño produce el sonido del animal y papá adivina.

Los padres deben hacer divertida y alegre la comunicación con sus hijos, hablarles de cosas graciosas, que rían juntos.

Jueguen a imaginar que el niño use su creatividad; el juego de: "si yo fuera", sirve para estos propósitos. El niño dice "si yo fuera avión" iría a Acapulco por ejemplo, y ahí me convertiría en sirena, tiburón o un pulpo. Papá o mamá pueden decir y "si yo fuera barco" navegaría por el mar, luego me convertiría en una ballena y daría un gran salto mojando a todos los que me estuvieran viendo.

Cuando los padres le den una instrucción a su hijo debe ser clara y tener acuse de recibo, esto quiere decir que el niño debe repetir lo que le pidieron para saber si comprendió.

Los rompecabezas, las loterías, los dominós para niños (de animales, frutas, juguetes, etcétera), las memorias son excelentes juegos para hacer que el niño desarrolle sus habilidades de concentración y atención. Lo importante es hacer de él un buen escuchador.

Envíe sus preguntas a expertos@aguila.eluniversal.com.mx

TRAYECTORIA Maestra de educación preescolar por la Escuela Nacional de Educadoras. Directora de Preescolar en el Instituto Alexander Bain de 1973 a la fecha. Diplomados en "Niños Preescolares" por The University of Alabama, y "Habilidades del pensamiento" por CECAMI. Autora de los libros de trabajo de la serie "Pirueta" para preescolares, "Mis trazos con rimas" y "Ya sé trazar". Es colaboradora de Kena y Tedi



Ver más @Univ_Estilos
comentarios
0