LINARES. Los 250 elementos de seguridad pública y vialidad del municipio de Linares, ubicado a 200 kilómetros al sur de la ciudad de Monterrey, fueron detenidos por elementos del Ejército tras varias denuncias de extorsiones y secuestros a empresarios, agricultores y ganaderos de la zona citrícola.

Con la retención de estos uniformados, asciende a 472 policías municipales de ocho localidades de la metrópoli, periferia y zona rural que son trasladados para la aplicación de controles de confianza o para iniciar indagatorias legales en su contra por la presunción de que en el ejercicio de sus funciones como servidores públicos participaron en actos delictivos.

En el operativo para la retención de los uniformados municipales participó más de un centenar de elementos del Ejército, policía estatal de caminos, policía federal preventiva, fuerza civil y agencia estatal de investigaciones.

Desde las 7:00 horas de ayer se acordonó el área aledaña a la sede de la Secretaría de Seguridad Pública y Vialidad a fin de impedir la salida de los uniformados o el ingreso a personas ajenas a la dependencia municipal.

Tanto los 210 preventivos y como los 40 elementos de tránsito fueron trasladados en autobuses oficiales a la Academia Estatal de Policía, en donde serán sometidos a investigaciones así como a exámenes de control de confianza.

Asimismo, trascendió que las armas a cargo de los policías municipales también fueron trasladadas a la capital del estado a fin de verificar si éstas habían sido utilizadas en la comisión de algún delito en la zona citrícola.

El patrullaje y la realización de operativos de seguridad en el municipio de Linares se mantienen a cargo de elementos de la Fuerza Civil y del Ejército Mexicano comisionado en la Séptima Zona Militar.