QUERÉTARO, Qro.— Integrantes de Amnistía Internacional (AI) se concentrarán frente a la Casa de la Corregidora —sede del gobierno del estado de Querétaro— para demandar la liberación inmediata de las indígenas ñhañhó, Alberta Alcántara Juan y Teresa González Cornelio.

Mediante un comunicado enviado a la prensa, Amnistía Internacional México confirmó que realizarán en Querétaro “acciones urgentes, además, el director ejecutivo de AI México, Alberto Herrera, entregará al gobernador José Calzada Rovirosa, una carta exponiendo nuestra preocupación por estas mujeres indígenas y de cómo su condición de pobreza y marginación, son las causas de que estén en prisión”.

El viernes 12 de febrero ambas mujeres, vecinas del municipio de Amealco de Bonfil, fueron declaradas presas de conciencia por Amnistía Internacional.

Alberta Alcántara Juan y Teresa González Cornelio, al igual que Jacinta Francisco Marcial (ahora en libertad), fueron encarceladas el 3 de agosto de 2006, acusadas de agredir y secuestrar a seis elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI).

El proceso seguido con Alberta Alcántara Juan y Teresa González Cornelio, involucra delitos contra la salud en su modalidad de venta de droga con una de ellas, y la coparticipación en el secuestro de seis elementos de la Agencia Federal e Investigación (AFI) con la otra.

Y aun cuando la defensa de Alberta y Teresa considera que no existen pruebas determinantes en su contra, para la Procuraduría General de la República (PGR), la culpabilidad en los delitos de secuestro y en daños contra la salud, están claramente comprobados.

“Detenidas durante tres años por un delito que no cometieron, sabrán en las próximas semanas si sus condenas se confirman o se anulan. Son presas de conciencia y deben quedar en libertad de inmediato”, puntualiza Amnistía Internacional México en su comunicado enviado a la prensa.

El organismo internacional cree que el encarcelamiento de estas mujeres indígenas ñhañhó fue una represalia por la manera en que los vendedores del mercado local reaccionaron el 26 de marzo de 2006.

“Sin motivos para probar que se produjo un secuestro, hace cinco meses Amnistía Internacional celebraba la liberación de una tercera detenida acusada injustamente de los mismos cargos, Jacinta Francisco Marcial”.

Se narra que las tres ganaron, en abril de 2009, una apelación contra su declaración de culpabilidad y se celebró un nuevo juicio en el que no se presentaron pruebas nuevas.

“Pese a esta victoria para la justicia, el sistema de justicia no parece rectificar correctamente y bajo argumentos absurdos y falta de evidencias en el proceso, Teresa y Alberta se convierten ahora en un reto para su gobierno al mantenerlas detenidas bajo proceso”.