Matan a otros tres allegados a Rogaciano
PETATLÁN, Gro.— Ahora mataron a tres empleados del ex líder de la Unión Ganadera Regional de Guerrero (UGRG), Rogaciano Alva Álvarez.
Fueron asesinados tras ser sacados a la fuerza de sus casas por unos 20 individuos armados y vestidos tipo militar, quienes llegaron cerca de las 2:15 horas de ayer a la comunidad serrana de La Calera, perteneciente al municipio de Petatlán, habitada por poco más de 50 personas.
Las víctimas laboraban en un rancho de Rogaciano Alva que se ubica en la comunidad vecina La Chaveta.
Primero se llevaron al comisario del lugar, Sixto Álvarez Peralta, de 41 años. Le argumentaron que querían platicar con él. Luego, levantaron al cuñado del comisario y peón del ex líder gremial, Sergio Sánchez Maciel, de 29 años, y al caporal Federico Valdovinos Ruiz, de 45 años. Todos originarios de La Calera.
Con estos tres homicidios, suman 27 las víctimas de un conflicto que rodea al ex alcalde priísta de Petatlán, Rogaciano Alva: 17 personas murieron el 3 y 4 de mayo en Iguala y Petatlán —entre éstas, dos hijos y un sobrino de Rogaciano; además, su hija Ana Karen fue secuestrada.
El jueves pasado, cuatro mujeres fueron asesinadas en San Luis La Loma, municipio de Tecpan —presumiblemente la esposa, una cuñada y dos hijas de Rubén Granados, El Nene, ligado con los crímenes de mayo. Este hecho derivó en una emboscada contra policías —dos murieron y seis quedaron heridos— que se dirigían a recabar datos de la ejecución de las mujeres.
Además, el pasado sábado por la noche, fue arrojada una hielera afuera de la casa de Rogaciano Alva, en cuyo interior se hallaba la cabeza del empresario y ganadero de Zihuatanejo, Andrés Núñez Izazaga, compadre de Rogaciano; había sido levantado.
Los hincan y ejecutan
Los cuerpos de Álvarez Peralta y de Sánchez Maciel tenían las manos hacia atrás y ambos presentaban disparos de cuerno de chivo en la cabeza. Las primeras diligencias arrojaron que fueron hincados y después asesinados.
La viuda de Sixto Álvarez, Ernestina Sánchez Maciel, relató que mientras dormían, por lo menos tres hombres entraron a la vivienda y se lo llevaron con el argumento de que querían platicar con él.
Otra de las viudas aseguró que vestían “como guachos (soldados)”.
Una vez reunidos los hombres se los llevaron a pie hasta el entronque de la carretera con el acceso del pueblo y después de media hora de haber sido raptados se escucharon los disparos.
Sánchez Maciel señaló que horas después fueron al lugar y encontraron a los tres hombres muertos. (Con información de Juan Cervantes)





