MÉRIDA, Yuc.— El procurador de Justicia de Yucatán, Pedro Sierra, fue la primera baja del gobierno que encabeza la priísta Ivonne Ortega Pacheco. Ayer jueves fue relevado y su lugar quedó ocupado por el ex juez José Guzmán Pacheco.

Este último, en 1978, fue rehén de reclusos que intentaron escapar del entonces centro penitenciario ubicado en el Parque de La Paz de estaciudad.

La versión oficial de la renuncia, de acuerdo con el ahora ex procurador de Justicia, es que “necesitaba tiempo para la atención de asuntos particulares y de mi despacho”.

Sin embargo, fuentes de la misma Procuraduría aseguraron que Sierra Lira fue destituido debido a que en días pasados relevó al director de Averiguaciones Periciales, Tomás Mendiburu Ortiz —por la presunta modificación de peritajes—, sin consultarlo con la gobernadora Ivonne Ortega.

El primer cambio en la administración de la gobernadora priísta, se desarrolló en medio de los reclamos y las críticas de algunos sectores de la población y partidos políticos, derivados del nombramiento como subsecretario de Gobierno del cuñado de la mandataria, Héctor Cabrera, quien continúa en el cargo.

Sierra Lira, reconocido por su trayectoria como abogado e integrante de la comunidad académica universitaria, había anunciado el proyecto de establecer una coordinación con sus similares de Quintana Roo y Campeche para el combate al narcotráfico y a la delincuencia organizada.

Su relevo, José Guzmán Pacheco, ha ocupado diversos cargos dentro del ambiente de la procuración e impartición de justicia.

A Guzmán Pacheco se le vincula también con el Colegio de Abogados de Yucatán y con miembros del Tribunal Superior de Justicia.

De acuerdo con los argumentos esgrimidos por Sierra Lira, la renuncia obedeció al cúmulo de trabajo en esa dependencia y a que necesitaba tiempo para atender asuntos particulares y su despacho de abogados.

Tras la remoción del procurador general de Justicia, el primero del actual gobierno, se espera que se sumen otros más, pero como parte de la iniciativa de ley que presentó la gobernadora Ortega para crear nuevas Secretarías, modificar las existentes y ampliar las facultades de otras.

Tomás Mendiburu Ortiz, relevado por Pedro Sierra Lira supuestamente sin autorización de la gobernadora, fue criticado días antes debido a que se le acusó de modificar algunos peritajes.