Más de tres años después de la muerte de la cantante pop británica Kirsty MacColl quien fue embestida por un barco mientras buceaba en Cozumel, su madre sigue esperando que se haga justicia.

En la tarde del 18 de diciembre del 2000; MacColl, de 41 años, buceaba con sus dos hijos adolescentes en una zona federal prohibida para barcos grandes cuando el yate de un prominente ejecutivo mexicano ingresó a la zona. Kirsty sufrió una muerte instantánea al quedar en el paso de la hélice del bote.

El mes pasado, en su primer viaje al país donde murió su hija, Jean MacColl, de 80 años, demandó a las autoridades mexicanas revisar el caso, que cree está lleno de irregularidades. Insistió en que funcionarios deben mejorar la aplicación de las leyes para que ninguna otra madre tenga que pasar por la misma pesadilla.

El viaje de Jean MacColl inició con un funeral en Cozumel, la isla caribeña a 20 kilómetros de la península de Yucatán, popular entre los viajeros por sus aguas color turquesa. Desde un bote ubicado en el sitio donde su hija fue embestida, Jean y amigos arrojaron una corona de flores con un listón que decía "Adiós a un ángel".

"Le dijimos adiós a Kirsty", dijo Jean MacColl a The Herald en una entrevista en su cuarto de hotel en la ciudad de México unos días después. "Pero aunque fue muy bonito, no cerró el episodio".

MacColl afirma que sintió que no tenía más opción que venir a México para encontrar la resignación, algo que no pudo hacer en Londres. Desde que su hija murió nunca fue buscada por el gobierno mexicano ni por el dueño del barco, indicó.

"En tres años nadie me ofreció sus condolencias; ciertamente no lo hizo González Nova", indicó refiriéndose a Guillermo González Nova, quien estaba en su bote con sus dos hijos, su nuera, un nieto pequeño y un ayudante cuando sucedió el accidente.

González Nova es presidente de Controladora Comercial Mexicana, la tercera cadena de tiendas de menudeo más grande de México. La compañía es dueña de más de 200 supermercados y restaurantes en todo el país.

El ejecutivo no devolvió las llamadas hechas a sus oficinas a finales de marzo. Su secretaria dijo que estaría fuera de México hasta mayo.

El ayudante, Juan José Cen Yam, testificó que manejaba el yate de González Nova durante el accidente que provocó la muerte de MacColl y lesiones a uno de sus hijos. Cen Yam, empleado de González Nova, fue convicto por la muerte de Kirsty MacColl. Fue sentenciado a dos años y diez meses de cárcel, castigo que fue levantado tras pagar una multa de mil 900 pesos, un peso por cada día de la condena. También se le exigió indemnizar a los hijos de MacColl con 25 mil 280 pesos, suma que tomó como base el salario mínimo en Quintana Roo.

Documentos de la corte establecen que Cen Yam, de 28 años, no tenía certificación para conducir el bote y que permitió que alguien se reclinara en el parabrisas del barco, lo que le tapó la vista.

MacColl y sus amistades no están convencidas de que sea la verdad. "Creemos que González Nova y su familia han influenciado de manera indebida los resultados del caso", indicó el activista de los derechos humanos Fred Shortland, miembro de la campaña Justicia para Kirsty, entre cuyos partidarios se encuentra el cantante de U2, Bono.

Incertidumbre y tragedia

La ley mexicana no permite que el caso de Kirsty MacColl se reabra, por lo que su madre está solicitando un nuevo juicio. El 12 de marzo entregó un documento a la fiscalía de Cozumel que muestra nuevas pruebas y señala testimonios contradictorios del juicio inicial, dijo su abogado Demetrio Guerra.

Todavía es muy pronto para decir si se abrirá o no un nuevo caso. Según documentos del juzgado que obtuvo The Herald , la escena del accidente descrita por los pasajeros del yate de González Nova, El Percalito , es completamente diferente a la que describieron otros testigos.

Las personas que estaban en el yate dijeron que iban a un nudo de velocidad. Otros testigos dijeron que el bote viajaba a 20 nudos. El límite de velocidad del área es de cuatro nudos. Los que se encontraban en el barco dijeron que no había señales que indicaran que había gente buceando en esa área. Otros testigos dicen que es un área conocida de buceo.

Los pasajeros dijeron que Cen Yam conducía el barco. Pero al menos un testigo declaró que Cen Yam no pudo haber sido el conductor porque él estaba en la parte trasera del barco.

Lo que no se discute es que alrededor de las dos de la tarde, Kirsty MacColl estaba buceando con sus hijos, Louis y Jamie, entonces de 14 y 15, años respectivamente, en el arrecife de coral Chankanaab, donde hay miles de peces tropicales de colores. El trío, junto con un guía de buceo, acababa de salir a la superficie después de una exploración submarina de media hora.

Los chicos oyeron un grito de ¡cuidado! Entonces el agua se tiñó de rojo por la sangre. Los chicos buscaron hasta que encontraron el cuerpo de su madre flotando boca abajo, casi cortado en dos.

Una vida interrumpida

Kirsty MacColl nació en 1959, hija de la coreógrafa Jean Newlove y el cantante de música típica británica Ewan MacColl. Su carrera musical comenzó desde la adolescencia con un grupo punk llamado Drug Addix. Después emprendió carrera como solista y también fue corista de Van Morrison, Talking Heads y los Rolling Stones, entre otros.

La madre de Kirsty MacColl y sus amigos la describieron como una mujer jovial y agradable que era a su vez una madre dedicada y amiga excepcional.

Una señal de cambio

Emilio Goicochea, subsecretario de Operaciones Turísticas de la Secretaría de Turismo (Sectur), dijo que está trabajando con la Secretaría de Ecología, Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para colocar boyas alrededor de áreas naturales protegidas y para indicar que los barcos no pueden entrar.

Dijo que planeaban fortalecer la aplicación de la ley de navegación en áreas turísticas, aunque gran parte del cambio tendrá que ser resultado de la educación.

"No podemos poner a policías que vigilen todo el día estas áreas pues son muy extensas", dijo el ex congresista. "Vamos a tener que informar a la gente los lugares donde los barcos sí pueden entrar y pedirle a las personas que reporten las violaciones a la ley", concluyó.

Según las leyes del arrecife de Chankanaab, que fue nombrado área natural protegida en 1996 por decreto presidencial, los únicos barcos de motor que se permiten en el área son lanchas pequeñas como las que se usan para transportar buzos. En ningún caso podrá entrar en el área un barco cuyo calado (la profundidad a la que la quilla se introduce en el agua) sea mayor a dos metros. El calado del barco de Guillermo Nova era mayor a dos metros, dijo Guerra, el abogado de la familia MacColl.