CULIACÁN,Sin.? La imagen de Cristo que se forma por las sombras de los brazos y hojas de un árbol sobre una marquesina de una residencia en la colonia Guadalupe de esta ciudad es motivo de polémica entre católicos al grado que creyentes de la mayor parte del estado y del extranjero se han desplazado para observar todas las noches este fenómeno.

Desde hace casi un mes, los dueños de la residencia que se ubica en la calle Ciudades Hermanas número 363 poniente, esquina con Manuel Banderas, en la colonia Guadalupe, se percataron de que la luz que emite una de las lámparas del alumbrado público, al chocar con el árbol de magnolia, proyecta sobre la marquesina de su hogar el rostro de Cristo.

El obispo de la diócesis de Culiacán, Benjamín Hernández Jiménez sólo ha externado que los caminos de la fe son muchos y que este suceso que se presenta en forma natural desde los primeros días de diciembre pasado debe servir a los católicos como una posible señal del señor.

Sin criticar, ni alabar la actitud que asumen muchos creyentes de la religión católica que acuden a ver la imagen que se forma todas las noches, el prelado, considera que este hecho que surge en una forma natural, debe ser analizado a fondo.

La propietaria del inmueble, Concepción Navarro de Esquer, comentó que desde que se difundió la aparición del rostro de Cristo sobre una de las paredes de su residencia, se estima que más de nueve mil personas han acudido por las noches a constatar esta imagen que en forma caprichosa se forma con las sombras de los brazos y hojas de un árbol que plantó hace más de quince años frente a su hogar.

En el mismo sector residencial y a sólo dos calles de la casa de la familia Navarro Esquer, varias personas han detectado que otros árboles plantados sobre las aceras proyectan imágenes similares, pero con menos definiciones del rostro de Cristo, como se puede apreciar en el hogar de Luis José Podesta.

Para el presbítero, Carlos Magaña son sólo sombras que toman figuras al proyectarse sobre la pared, sin que ello implique algún tipo de milagro, por lo que pidió a los católicos a conservar la ecuanimidad, por tratarse de un fenómeno que pronto terminará al perder las hojas el árbol de magnolia. Desde el pasado tres de diciembre, todas las noches cientos de curiosos acuden a la esquina que forman las calles Ciudades Hermanas y Manuel Banderas para observar la imagen de Cristo que se forma con las sombras de lo brazos y hojas del árbol.