Monterrey.— Los precandidatos del Partido Acción Nacional (PAN) a la gubernatura de Nuevo León, Margarita Arellanes Cervantes y Felipe de Jesús Cantú Rodríguez, afirmaron estar dispuestos a celebrar un debate, porque en el blanquiazul sí hay un proceso democrático, “a diferencia del PRI, donde a una persona le dijeron por dedazo: tú lo serás”.

No obstante, aseguraron ambos que reconocerán si el triunfo no les favorece en la elección interna del 15 de febrero, y juntos levantarán los brazos en señal de victoria.

Felipe de Jesús Cantú reconoció que cada que hay un proceso interno ocurre una subdivisión, y hoy existe “el grupo de Felipe” y “el grupo de Margarita”, por eso dialogaron al respecto, para que una vez que resulte un ganador haya un solo grupo: el de los panistas que buscan recuperar la gubernatura de Nuevo León.

Cantú Rodríguez dijo que el gobernador de la entidad, Rodrigo Medina, pretende mantener su poder más allá de su sexenio, al haber decidido no sólo la nominación de la precandidata del PRI al gobierno del estado, Ivonne Álvarez, sino también impulsar a personas de su equipo para las candidaturas a presidentes municipales, diputados federales y locales.

Recordó que en septiembre pasado en su discurso ante jóvenes priístas de todo el país, dijo Medina que le gustaría quedarse en el gobierno por 30 años como Porfirio Díaz, porque “me encanta lo que hago”.

Respecto a la denuncia del PRI en el sentido de que tanto ella como Felipe de Jesús Cantú, han incurrido en actos anticipados de campaña, al colocar anuncios panorámicos y publicidad móvil en vehículos de motor, dijo Arellanes que “esta es la diferencia de cuando hay un proceso democrático, a cuando el famoso dedazo dice: tú lo serás, y no se necesita hacer publicidad alguna”.

Expuso: “Las acusaciones del PRI son argumentos que intentan desvirtuar, porque ellos no se siguen los procesos democráticos”.