PACHUCA. La Procuraduría de Justicia de Hidalgo alista, por medio del Ministerio Público, el juicio de procedencia en contra del alcalde de Tepehuacán de Guerrero, Hilario Mendoza Benito, que en diciembre propinó una golpiza a su esposa y le fracturó la mandíbula, acción que significa el primer paso para el desafuero del funcionario.

El procurador Alejandro Straffon informará los detalles sobre la petición del juicio de procedencia al Congreso local, ya que la semana pasada la víctima, Virginia Ortiz Monroy, realizó la ampliación de su declaración, que quedó asentada en la averiguación previa 12/DAP/540/2013.

La agresión a la también presidenta del DIF de Tepehuacán, enclavado en la Sierra de Hidalgo, ocurrió el 20 de diciembre cuando el edil arremetió en contra de la mujer mientras preparaba alimentos para los desayunos escolares.

Ortiz Monroy fue intervenida quirúrgicamente de la mandíbula, lesión que le impidió hablar y fue apenas la semana pasada cuando concluyó con su declaración.

Debido a la gravedad del caso, el agente del Ministerio Público solicitó una orden de restricción para salvaguardar la integridad de Virginia Ortiz, quien se encuentra a resguardo de la Policía Estatal.

La presidenta de la Comisión de Equidad de Género, Imelda Cuéllar Cano, aseveró que están al pendiente de este caso, por lo que este miércoles, al reiniciar sesiones el Congreso local, pedirá al pleno que la agresión no quede este hecho en la impunidad. “Que el caso sea juzgado conforme a derecho, no porque sea alcalde debe de quedar impune”, comentó.

La legisladora dio a conocer que si bien no ha tenido contacto directo con la afectada, sí le ha dado seguimiento a su estado de salud, por lo cual conoce que se mantiene en recuperación. Sin embargo, la víctima todavía tiene dificultades para hablar.

Según la Ley de Violencia Familiar en Hidalgo, en casos donde de hay agresiones graves la víctima está impedida de realizar un convenio o bien otorgar el perdón, en tanto que el Código de Procedimientos Penales, señala que se debe seguir por oficio.