HERMOSILLO. Luego de asegurar que no hay indicios de que exista más contaminación en los ríos Sonora y Bacanuchi, la Comisión Presidencial para atender la contingencia por el derrame de los 40 mil metros cúbicos de sulfato de cobre acidulado por la mina Buenavista del Cobre, anunció que se entregarán los primeros cheques a los productores afectados.

Luego de sostener una reunión de trabajo con los alcaldes de los municipios afectados, se llevó a cabo una conferencia en la que el procurador de Medio Ambiente de la Profepa, Guillermo Haro Belchez, aseguró que, de acuerdo a los trabajos realizados, no se tienen más indicios de contaminación en los ríos anteriormente mencionados.

Explicó que el agua que llega a esas cuencas no son derrames, sino el arrastre de la corriente, y hasta el momento no se ha detectado material que represente un peligro para los habitantes del río Sonora.

“La coloración de fierro no ha elevado la contaminación del agua ni provoca daños a la salud”, estableció.

Alfonso Navarrete Prida, secretario de Trabajo y Previsión Social, explicó que los avances en el plan de remediación, donde se han subsanado problemas con el abastecimiento de agua potable con la contratación de 52 pipas y 20 potabilizadoras temporales.

Informó que los primeros 522 millones de pesos fueron asignados a contratación de pipas de agua, tinacos, así como plantas potabilizadoras. Además de la reparación de daños a la salud y resarcimiento del sector agropecuario; está sujeto a cambios que sean determinados entre los tres niveles de gobierno.

Los cheques que se entregarán a más de 6 mil productores serán para el resarcimiento de daños a las amas de casa afectadas con el desabasto de agua y también de los comerciantes de la zonas dañas por el derrame de más de 40 mil metros cúbicos de cobre.