VILLAHERMOSA

Un nuevo caso de negligencia médica se suscitó en Tabasco, a sólo una semana de que una madre diera a luz en los pasillos del Hospital de la Mujer, otra joven abortó en el baño del mismo nosocomio, lo cual originó la destitución de un médico encargado del área de urgencias.

La Dirección General del Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco (ISSET) cesó de sus funciones al médico Arturo Lozano Álvarez, ginecólogo responsable del área de urgencias los fines de semana y días festivos, por haberle negado la atención a Amy Jazmín “N”, de 16 años, a quien canalizó al Hospital de la Mujer, donde finalmente abortó en el baño.

Amy llegó en compañía de su esposo a las 15:55 horas del domingo al hospital del ISSET para solicitar una valoración ginecológica, ya que presentaba fuertes dolores en el vientre, pero ninguno de los dos encargados del área de admisión la atendió, debido a que uno estaba integrando el expediente médico de otra paciente y el otro solicitando su pase de salida de turno.

A través de un comunicado, el gobierno del estado informó que en el ISSET, donde había solicitado atención como derechohabiente, el doctor Lozano Álvarez le comentó que ella perdió su derechohabiencia por ser hija de trabajador y estar embarazada, sin realizarle el interrogatorio ni la exploración física como marca la norma oficial, ni siguiendo el protocolo de Cero Rechazo adoptado por la institución.

El despacho del gobierno de Tabasco apunta que el mencionado médico “indebidamente le indicó que debe acudir al Hospital de la Mujer, puesto que es allá donde atienden a la población abierta, omitiendo a la vez informarle y consultarle al subdirector en turno al doctor Rafael Ruiz Guzmán, permitiendo el retiro de la paciente alrededor de las 16:10 horas”.

Deslindan responsabilidades

Sin embargo, la encargada del Hospital de la Mujer, María Teresa Hernández, deslindó al personal médico de ese nosocomio de responsabilidades en el aborto de la menor en el baño de la sala de espera.

Hernández Marín señaló que la joven acudió inicialmente al ISSET, pero fue canalizada al Hospital de la Mujer. Llegó a la ventanilla y preguntó sin dar explicación por la ubicación del baño, donde abortó.

Señaló que la menor de 16 semanas de embarazo no tenía registro de ingesta de medicamentos ni ácido fólico, y tampoco de control prenatal, y llegó al hospital “ya con el aborto inminente”.

El jefe del área de obstetricia del hospital, Carlos Bocanegra, explicó que la paciente presentaba problemas cromosómicos, y el cuello no estaba lo suficientemente fuerte para aguantar la salida del producto.

Esto ocurre a unos días de que las autoridades estatales advirtieran que nunca más debía presentarse un nuevo caso de negligencia médica, luego de que el pasado domingo 2, en ese mismo hospital, Carlota Guzmán dio a luz en la sala de espera, lo que generó la destitución de la directora y dos médicos.