Cuelga hábitos por la política
El padre Iván de Jesús Bernal Zamora es un activista de los derechos de los migrantes y está en permanente contacto con organizaciones en Estados Unidos y México, así como con los sacerdotes que dirigen albergues en el país. (Foto: AMALIA ESCOBAR )
Agua Prieta
“Me han pedido un servicio de la sociedad de tres años, y estoy en tiempo de discernimiento”, expresa el padre Iván de Jesús Bernal Zamora, a quien parte de la población de esta frontera ubica como única opción para cambiar el rumbo de un gobierno en manos de una “pareja imperial”, calificada así por ciudadanos y políticos de oposición.
Nació en la frontera de Nogales, Sonora, el 14 de agosto de 1977; el joven es hijo de un empresario, de clase media; tiene ideas liberales, es considerado como un sacerdote moderno, intelectual, humilde, aficionado a las nuevas tecnologías, valiente y propulsor de la teología de la liberación.
Desde que cursaba la secundaria, nació la inquietud de ingresar al seminario, recuerda, lo cual consiguió en 1995; al salir, hace 11 años, fue enviado a servir a Agua Prieta, población de la que ya se siente parte.
Dedicado a buscar satisfacer las necesidades de los más desprotegidos, es director del Centro de Atención a los Migrantes Exodus (CAME), un albergue que da servicio a más de 50 personas al día en la parroquia La Sagrada Familia de Jesús y cada año realiza el programa Migratón, para sostener la causa.
Es un activista de los derechos de los migrantes y está en permanente contacto con organizaciones en Estados Unidos y México, así como con los sacerdotes que dirigen albergues en el país.
Desde el 31 de mayo el clero le concedió un permiso indefinido; lo solicitó para dedicarse de lleno a buscar el cambio de conciencia en la población y defender a los migrantes.
El padre Iván, como se le conoce en Agua Prieta, asegura que no le mueven las aspiraciones políticas, “la verdad, no”, afirma.
“No he tomado la decisión total. Si fuera por la búsqueda política de un puesto, digo que no, lo que realmente me tiene en el proceso de reflexión es la realidad de Agua Prieta”, y refiere que en este municipio existe un caso similar al de la “pareja imperial”, los Abarca de Iguala, en Guerrero.
Aquí también se vive una situación desagradable: una “familia imperial” que tiene casi 20 años en el poder, los Terán, aunque en este municipio sonorense no se han registrado hechos violentos de la magnitud de la masacre y desaparición de normalistas.
EL UNIVERSAL buscó a la presidenta municipal, Irma Villalobos Rascón, a través del titular de comunicación social del ayuntamiento, Nahum Acosta, y al diputado local Vicente Terán Uribe, por medio de su asistente Manuel Parra, pero nunca hubo una respuesta.
Historia de poder
El padre Iván comenta que Vicente Terán, diputado local por el PRI y esposo de la presidenta municipal Irma Villalobos, es una persona ambiciosa, quien —incluso, acusó— tiene nexos con el narcotráfico y un proceso pendiente en Estados Unidos; dice que este personaje político ha vivido de la corrupción, el desfalco a empresarios y que ha hecho de la política un negocio de familia.
En la zona, la actividad económica se ha desplomado en los últimos 20 años, de 38 maquiladoras, sólo hay 10; mientras que Vicente Terán fundó su colonia, llamada Nuevo Sonora, toda pavimentada; tiene grandes amigos en la política nacional en quienes se ampara; vende sus terrenos a quienes desean asentar sus negocios en Agua Prieta; cuenta con tres ranchos con tecnología de punta; “la pobreza es la imagen social y estamos gobernados por el crimen organizado con la permisividad de la autoridad local”, dice.
También, agrega el sacerdote, ejerce ayuda social entre comillas, pues tiene almacenes y ahí guarda el apoyo federal que en tiempos de contingencia lo entrega como propio.
“Tuve un problema con Vicente Terán porque en 2009 tuvimos un programa del Migratón, para colectar despensa y recabamos 10 toneladas, pero él nos exigió siete toneladas con el argumento de que también atiende migrantes, yo no quise, pero amenazó a las organizaciones civiles y terminaron entregándoselas, las guardó y la regresó al pueblo como ayuda propia, haciendo caravana con sombrero ajeno”, asegura.
Expresa indignación porque esta pareja de Agua Prieta, que se ha cedido la alcaldía —cuando uno de ellos es alcalde, el otro es diputado local—, “ahora va por el carro completo”. Se valen de toda clase de artimañas el día de la elección, desde la compra de votos hasta la duplicación de boletas y entrega de regalos, entre otros, afirma.
Irma Villalobos Rascón, alcaldesa, va por la diputación federal; las hijas Liza María Terán, directora del DIF en Agua Prieta, e Irma Terán Villalobos, dirigente de la Red Juventud Popular del PRI en Sonora, podrían buscar la alcaldía o una diputación local, si no es que el jefe de la familia, Vicente Terán, decide aspirar por tercera ocasión a la presidencia municipal. Aún no definen sus posiciones, pero todos se están promocionando, comenta.
“Estoy del lado del pueblo, porque tenemos un pueblo sin ley, vivimos un Estado fallido en Agua Prieta, por eso estoy en este proceso de reflexión, no es un deseo de mi parte —ser alcalde—, siempre he criticado a las instituciones corrompidas, desgastadas, a los partidos políticos que sólo buscan el poder, candidaturas que promueven proyectos personales.
“Repito que hace falta un cambio en Agua Prieta, no de siglas ni de personas, sino radical, un movimiento social muy fuerte donde todos nos activemos contra una dictadura de 20 años, en contra de la ‘familia imperial’.
“He trabajado mucho, me he dedicado a abrir los ojos de la gente de cómo podemos comprometernos, cómo cuidar el voto, es necesario construir el tejido social que está totalmente roto, por ahí está el trabajo y por ahí podemos darle, si es posible”, enfatiza el ex vicario de la parroquia La Sagrada Familia de Jesús.
No tiene afiliación partidista
El padre Iván Bernal no está afiliado a ningún partido político; no obstante, se le ubica en eventos del PAN, y el Partido del Trabajo lo quiere como candidato a la alcaldía; goza de grandes simpatías entre los pobladores, quienes lo ven como una opción para el cambio de gobierno.
—Su libre expresión puede provocar reacciones en su contra, ¿no tiene miedo, padre?
—No, no tengo miedo, tengo miedo de quedarme callado, de no expresarme, de ser una persona pasiva, que se agache, que no levante la voz, de llegar a un grado de conformismo.
—¿Y su familia qué dice?
—La familia vive en una permanente angustia por mis ideas, no tratamos con cualquier persona, estamos tratando con un hombre lleno de ambiciones de poder, que no se toca el corazón para ejercer el poder, pero no podemos ser cómplices de lo que está sucediendo aquí.
Agua Prieta, historia revolucionaria
Este municipio se ubica al noreste del estado y hace frontera con Douglas, Arizona, lo que lo hace punto clave para el cruce de migrantes. Sobre su historia se escribieron importantes páginas de la lucha social más trascendente de nuestro país, como la Revolución Mexicana: aquí combatieron por sus ideales personajes como Álvaro Obregón, Francisco Villa, Venustiano Carranza, Lázaro Cárdenas y, en especial, Plutarco Elías Calles.
En este municipio se firmó el Plan de Agua Prieta, el 23 de abril de 1920, proclamado por el gobernador Adolfo de la Huerta para desconocer el gobierno de Venustiano Carranza.