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Desde mayo pasado, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) alertó al gobierno de Baja California Sur sobre la necesidad de reforzar su capacidad de respuesta ante lluvias y huracanes.

A través del Atlas de Vulnerabilidad Hidrometeorológica, entregado al gobierno local, esta dependencia explicó que “durante la temporada de lluvias y ciclones tropicales se ocasionan fallas en la infraestructura energética provocando la interrupción del funcionamiento de las estaciones de rebombeo de los sistemas de agua potable”.

En el documento, obtenido por EL UNIVERSAL a través de una solicitud de transparencia, se pide incrementar la capacidad de respuesta ante contingencias y modernizar las estaciones locales para tener un mejor pronóstico de las trayectorias de las lluvias.

Describe también que en la entidad no existen grandes ríos sólo arroyos que llevan agua en la temporada de lluvias, y permanecen secos el resto del año.

“Cuando se presentan lluvias extraordinarias por algún ciclón, estos cauces conducen grandes volúmenes de agua que desembocan al océano Pacífico y al Mar de Cortés, lo cual pone en riesgo a la población, la infraestructura y las actividades productivas”, recalca.

El mes pasado, el Sistema Meteorológico Nacional (SMN) explicó que el calentamiento del mar en la zona lo hacía vulnerable al embate de eventos climáticos como los registrados en días pasados, debido a la interacción de dos temperaturas diferentes.

La Conagua advirtió que “aunque el gobierno estatal y los municipios cuentan con personal para atender todo tipo de eventualidades, se requiere reforzar su capacidad de respuesta para la atención de emergencias ocasionadas por fenómenos hidrometeorológicos, junto con equipo especializado, sobre todo en los municipios de Los Cabos y Comondú”.

También explicó que las obras de captación de los sistemas de abasto, de ríos o pozos de agua potable, son afectadas por las grandes avenidas que ocasionan arrastre de sólidos y basura, en especial en zonas rurales donde los pozos están construidos dentro de los cauces.

Especialistas del SMN también advirtieron que Oaxaca y Guerrero son vulnerables al embate de las tormentas y huracanes.