Guadalajara.— El Foro Internacional de Políticas de Bienestar y Desarrollo, organizado por el gobierno de Jalisco y la Secretaría de Desarrollo Social del gobierno federal, arrancó la mañana de este lunes con una protesta de estudiantes de la Universidad de Guadalajara, que durante la inauguración pidieron justicia para los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos desde el pasado 26 de septiembre en Iguala, Guerrero.

Los alumnos de la maestría en Gestión y Desarrollo Social del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) sacaron una manta con la leyenda “Vivos se los llevaron, vivos los queremos” y gritaron varias consignas mientras el gobernador Aristóteles Sandoval leía su discurso, por lo que tuvo que improvisar y declaró su solidaridad con los normalistas.

Los universitarios, igual que los 200 participantes en el foro, acudieron a escuchar los debates sobre lo que implica el concepto “Bienestar” y cómo se puede medir éste para aterrizarlo en políticas públicas.

Karina Quevedo, una de las estudiantes que participó en la manifestación, indicó: “Sin justicia no puede haber bienestar y en un foro como éste no podíamos dejar de visibilizar la situación del país (...) venimos a ver si realmente se va a hablar de propuestas desde el pueblo y desde la realidad en que está el país”.

Pero el tema de Ayotzinapa no sólo fue tocado por los universitarios, sino que también algunos de los ponentes y organizadores lo mencionaron para utilizarlo como ejemplo de lo que se discutirá a lo largo de tres días (del 24 al 26 de noviembre).

David Gómez Álvarez, subsecretario de Planeación y Evaluación del gobierno de Jalisco, indicó que el objetivo de este evento es discutir la forma de medir el bienestar introduciendo indicadores subjetivos, como la percepción de felicidad de los ciudadanos, para desarrollar políticas públicas más adecuadas y que no sólo se basen en indicadores objetivos, pues se ha visto que éstos no determinan por completo el nivel de la calidad de vida de las personas.

Indicó que la décima ponencia del evento (la primera del 26 de noviembre) estará dedicada a discutir porqué un país que presenta profundas desigualdades y en el que suceden cosas como la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, autorreporta un alto índice de felicidad.

Rodolfo de la Torre, coordinador de los informes sobre Desarrollo Humano en México del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, señaló la necesidad de ubicar lo que sucedió en Ayotzinapa en el contexto de lo que se discute en el foro, donde se abordarán conceptos multidimensionales que toman tanto en cuenta aspectos objetivos y subjetivos que en ocasiones no concuerdan.

Así, para ejemplificar lo anterior usó el caso de Iguala —donde ocurrió la desaparición de los normalistas— que según el índice de felicidad en México se ubica en el lugar 66 del país, mientras que Guadalajara —donde se lleva a cabo el foro— está en el lugar 70.

“Es importante tomar en cuenta la libertad que tienen las personas para ser y hacer lo que desean (...) porque estar satisfechos o felices no significa ser autónomos y tener la libertad de hacer lo que deseamos”, dijo.

Durante su intervención, Eduardo Sojo, presidente del Instituno Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), indicó que este organismo trabaja en la medición de los índices subjetivos de bienestar en el país para hacer cruces de información con otros datos.

Señaló que en las distintas encuestas que se han levantado durante este año en el territorio nacional se han incorporado módulos sobre el bienestar que autorreportan las personas, por lo que en los resultados que se den a conocer en 2015 comenzarán a fluir estos números.