Hipólito Mora, fundador de las autodefensas de La Ruana, Michoacán, reiteró que desea seguir dentro de la Fuerza Rural, y señaló que si esta agrupación desapareciera estaría dispuesto, de ser necesario, a tomar nuevamente las armas.

"Si llegara a acabar esto de la Fuerza Rural, si se necesita, estoy dispuesto a tomar las armas, ya lo hice una vez, por qué no lo haría otra vez, ojalá que no se necesite", dijo.

En su casa, donde se encuentra velando a su hijo Manuel, quien falleció durante el enfrentamiento con el grupo de José Antonio Torre, "El Americano", Hipólito Mora enfatizó que su intención es seguir adelante con sus ideales que ahora están "más sólidos que nunca, con la pérdida de mi hijo. A pesar de que estoy muy golpeado me siento más fuerte".

Narró que su esposa, llorando, le dijo: "Yo no quería que hicieras esto, ya lo hiciste, te admiro, me siento orgullosa de lo que has hecho, y ahora te voy a pedir que le eches más ganas que nunca, que sigas adelante, que sigas luchando por la gente que lo necesita".

Sobre las investigaciones que realizan las autoridades, dijo que cuando le querían hacer la prueba de radizonato les dijo: "Yo les evito que la hagan, yo sí disparé".

Agregó que no le dieron el rifle para traerlo en la mano; "desde que entré a la Fuerza Rural me dieron las armas para hacer el bien, para defenderme, disparé, pero disparé para defenderme, estoy seguro que no le pegué a nadie, pero de que disparé sí lo hice, siempre he aceptado las cosas como son, no me gusta nada con mentiras, la verdad aunque me afecte a mí mismo", señaló.

Hipólito Mora calculó que el grupo de José Antonio Torres, "El Americano", era de entre 300 y 400 personas, mientras que del suyo alrededor de 40.

"Aquí están las consecuencias de no atender a mis súplicas, estoy sufriendo el dolor más grande en la vida pero hay que aguantar".

spb