Un promedio de 300 elementos de la Policía Federal (PF) arribaron este sábado a Cancún, Quintana Roo, para resguardar el Aeropuerto Internacional y la zona turística, ante la posibilidad de que las fuerzas magisteriales que rechazan la recién aprobada Ley General del Servicio Profesional Docente, bloqueen los accesos.

El grupo de las fuerzas antimotines está al mando del comandante con clave “Espartaco”, quien informó que los elementos están especializados en maniobras de disuasión y control de multitudes, razón por la que no portan armas.

“El aeropuerto es una de las bases principales que debemos resguardar, sobre todo a los visitantes, turistas, para evitar situaciones que alteren el orden”.

El comandante “Espartaco” dijo que se mantendrán en este destino el tiempo que sea necesario, hasta que existan condiciones para descartar incursiones de profesores, que pudieran trastocar el orden de la zona hotelera o el aeropuerto.

En la semana, el comité de lucha del magisterio en Cancún comunicó que contemplaban como último recurso bloquear los accesos a la zona turística y el aeropuerto, de no ser escuchados y sus demandas cubiertas.

Además, el pasado viernes, maestros inconformes de Chetumal arremetieron contra los vehículos donde viajaban en gobernador Roberto Borge Angulo y sus escoltas, cuando dejaban el Palacio de Gobierno.

Ayer, maestros marcharon por el centro de Cancún y reafirmaron que no volverán a las aulas hasta que sean cumplidas sus demandas. En la capital continúa el plantón frente a la sede estatal.

Marchan en cuatro estados

Maestros disidentes del Sindicato Nacional de Trabajadores del Estado (SNTE) en Jalisco marcharon y bloquearon durante casi cinco horas las principales avenidas de Guadalajara en rechazo a la Ley General del Servicio Profesional Docente.

En el estado, la convocatoria a las movilizaciones en repudio a la reforma educativa no habían tenido mayor eco, hasta ayer, que reunió a unos 10 mil maestros (según los organizadores) y a la que se unieron sindicalizados del Colegio de Bachilleres.

En Veracruz, Chiapas, Quintana Roo y Yucatán, los maestros inconformes también realizaron marchas, tomas de casetas y plantones, mientras que representantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en Chihuahua anunciaron que este domingo tomarán en forma simultánea la mayoría de las casetas de peaje en las carreteras de cuota del estado.

Por su parte, los llamados maestros democráticos del SNTE en Colima realizarán una marcha por las principales calles de la capital.

Juan Carlos Banderas, del Movimiento de Bases Magisteriales en Jalisco, explicó ayer que decidieron manifestarse aunque el Senado aprobó la noche del martes la ley, porque tienen la esperanza de que el presidente Enrique Peña Nieto vete las reformas aprobadas o promueva una controversia constitucional.

Comentó que hasta el momento la mitad de los 70 mil profesores del estado están a favor del paro el próximo miércoles.

En Xalapa, Veracruz, la movilización concentró a unos 25 mil maestros, según los organizadores.

Con cartelones, mantas, bailes y arengas, los inconformes se plantaron frente a Palacio de Gobierno e hicieron un llamado a la sociedad a unirse a su movimiento contra las reformas impulsadas por el gobierno federal.

Mientras que en Chiapas, los “paristas” bloquearon las casetas de cobro de las carreteras de cuota de Tuxtla Gutiérrez-San Cristóbal de las Casas y Ocozoautla de EspinosaArriaga, que unen las regiones de los Altos e Istmo-Costa de Chiapas.

Los inconformes indicaron que en ambas casetas se libera el paso de automovilistas a cambio de una “colaboración voluntaria” que el magisterio utilizará en papelería y el combustible de autobuses, que trasladan a docentes que participan en la ciudad de México en la concentración de la CNTE.

Ven más un castigo

Maestros de las secciones 33 y 57 del SNTE y de la CNTE en Yucatán tomaron las calles de Mérida, para protestar por la reforma educativa.

Hicieron varias representaciones de protestas, entre ellas, la crucifixión de un maestro en señal de que la reforma educativa busca castigarlos, más que mejorar el sistema educativo en México.