CIUDAD JUÁREZ

La escena que el grueso de los fronterizos pensaron nunca más volver a vivir regresó. Patrullas de policías ministeriales y municipales revisando casas, cerrando calles con las armas listas para cualquier incidente y peritos colocando los tradicionales cordones amarillos y rojos por momentos tocó fibras sensibles en la ciudad; otra vez una masacre conmovía a todos y puso en alerta a la ciudad.

Una familia entera fue atacada a tiros —según la Fiscalía de Justicia en la Zona Norte (FJZN)— por dos hombres, esto se informó tras encontrarse dos casquillos diferentes, aunque ambas de rifles de alto poder AK-47.

Según testimonios de sobrevivientes, dispararon a mansalva contra todos los que departían en el patio de una casa de la marginal colonia Loma Blanca, dejando un total de 13 víctimas, nueve de las cuales quedaron tendidas ahí mismo, mientras que otros tres fueron llevados mal heridos a un hospital local; uno murió horas después.

Las víctimas, según el reporte de la FJZN, fueron ocho hombres, de entre los que destaca un joven de 15 años, y dos mujeres, una de ellas una niña de siete años, que según sus familiares sólo salió de su cama a despedirse de sus primos y tíos. Tenía que dormir, pues al siguiente día debía que ir a la escuela.

El gobernador César Duarte dijo que en tanto no se esclarezca el asesinato se mantendrá una alerta especial en esta ciudad fronteriza, a fin de evitar un hecho similar.

Aseguró que este tipo de casos, que son lamentables, “no frenarán el combate a la delincuencia y no representa una alerta ni repunte en materia de violencia”.

El homicidio múltiple ocurrió poco después de las 20:30 horas en una humilde vivienda ubicada sobre la carretera Juárez Porvenir y calle Raymundo Herrera, en la marginal colonia de Loma Blanca. Ahí se hallaron 35 casquillos de AK-47, 20 de los cuales impactaron en las víctimas. Se informó que en el festejo había 25 personas, por lo que la tragedia pudo ser mayor.

Según el fiscal, Jorge González Nicolás, fueron dos tiradores los que provocaron este caos. Aparentemente inexpertos, pues el blanco probablemente era una persona de entre 27 y 30 años, de quien no se pueden revelar mayores datos para no entorpecer las pesquisas; lamentablemente en la refriega mujeres y niños quedaron sin vida.

“Hay un amplio grupo de investigadores tratando de esclarecer esto lo más pronto posible. Todo el sector está vigilado por policías municipales. La gente debe estar consciente que trataremos en la medida de lo posible prevenir esto y, sobre todo, deben tener confianza en nosotros para que no vuelva el miedo”, apuntó.