Confirman que mató un payaso a Arellano
LOS CABOS
Un sólo agresor vestido de payaso, su posible festejo de cumpleaños y tres disparos directos en la cabeza con un arma de las llamadas matapolicías, son los resultados de las primeras investigaciones sobre la ejecución de Francisco Rafael Arellano Félix, que ocurrió el viernes 18 de octubre en Los Cabos.
En entrevista, el encargado del despacho de la Subprocuraduría Regional Zona Sur, Mario Alonso Zazueta Obeso, informó sobre el avance de las pesquisas que se han levantado, como son reportes de inspección del lugar, dictamines periciales, diligencias ministeriales, además de que se han recabado entre 35 y 40 testimoniales de personas que se encontraban en el sitio el día de la ejecución.
“Estamos desahogando las testimoniales de las personas que se encontraban en el lugar, aproximadamente van hasta el día de ayer entre 35 y 40 testigos”, expresó.
De las primeras declaraciones se desprende que se celebraba su cumpleaños, pues así lo refirieron los testigos, comentó Zazueta Obeso.
“Al parecer era una fiesta familiar... algunas personas comentaron que pensaban que era el cumpleaños del señor”.
Interrogado sobre las versiones de que el agresor iba vestido de payaso, afirmó que en ese sentido se hicieron los primeros reportes a las autoridades y de igual modo está fue la descripción que realizaron los testigos. “De las testimoniales, es lo que se advierte”, dijo el funcionario.
El subprocurador encargado agregó que Francisco Rafael Arellano Félix recibió tres balazos en la cabeza y no dos como originalmente informó la Procuraduría del estado. Detalló que el agresor utilizó un arma de fuego calibre 5.7.
Luego de la agresión, el sujeto huyó. Agregó que algunas versiones refieren que habría escapado a bordo de un automóvil rumbo a la playa, para subir luego a una lancha. “Esto lo estamos investigando”, dijo.
Zazueta mencionó que en el lugar de los hechos —el salón de fiestas Ocean House, en el corredor turístico San José del Cabo-Cabo San Lucas— se estableció la identidad de Arellano Félix, pues se encontraban allí dos de sus hijos y su mujer, añadió.
Confirmó que Arellano Félix no contaba con ninguna orden judicial en su contra, por lo que seguirán las investigaciones en el fuero común. La Subprocuraduría de investigaciones Especiales, el Ministerio Público y el procurador estatal determinarán si piden a la PGR que atraiga el caso.