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Historia “Quiero justicia, no despensas”

El Universal
Martes 08 de octubre de 2013
<b> Historia </b> Quiero justicia, no despensas

FAMILIA. Irma sostiene al bebé que dio a luz en el patio de la clínica; Margarito (atrás) dice que no tienen miedo de hablar. (Foto: LUPITA THOMAS QUADRATÍN )


JALAPA DE DÍAZ.

Margarito Andrés Velásquez, el padre de Salvador, el niño que nació en el patio de un hospital de Jalapa de Díaz, asegura que no quiere despensas, sino que cambien al personal de la clínica y mejoren el servicio.

“Vino la gente de la clínica, que me van a dar despensa, dinero, para que yo no hable; yo no quiero una despensa si ayer que pedí que me apoyaran no lo hicieron”, expresa.

Margarito es esposo de Irma y asegura que se salieron de la clínica esa mañana del 2 de octubre porque la enfermera de nombre Juliana les pidió que esperaran afuera, pues argumentó que el niño aún no estaba listo para nacer.

Como a 10 metros de la clínica, narra, nació el bebé, con ocho meses de gestación. “El ultrasonido salió que ya tiene 38 semanas de gestación y ellos dijeron que el bebé estaba arriba todavía”, dijo.

Luego de que nació, las enfermeras fueron al pasto y recogieron al niño, y después le pidieron comprar medicamentos.

“Ya no me devolvieron la receta; compré el jabón, la medicina y me estaban cobrando mil 500 de la cama, Yo no le pagué, porque ya no traía nada de dinero, nos dio de alta como a las ocho de la noche”, relata.

En su casa tiene una hamaca, algunas sillas y cocina. Sin embargo, al igual que Irma, dice que no tiene miedo de hablar.

“Ayer amenaza (personal de la clínica) si mi mujer habla la va a dar de baja; no le tengo miedo porque yo trabajo, gano un poco en el campo y no quiero su ayuda”, menciona.

La petición que hace a las autoridades es que mejoren la clínica, que cambien a los médicos y, si es posible, que hagan justicia.

“Nosotros queremos que se retiren todos los que se encuentran en la clínica, que haya más atención... llegan otros pacientes, les dan ficha, pero no los atienden, los mandan a su casa”, afirma.

En su casa no hay ningún viso de tecnología; no tiene teléfono ni computadora, pero está de acuerdo en la difusión de la imagen de su esposa en redes y medios informativos, “porque si no nunca vamos a decirlo, queremos que se haga justicia”.

Son, define, “asesinos del pueblo”; “mientras están con el novio, durmiendo, nunca abren la puerta, no nos atienden”.

Dicen que el doctor llega hasta las ocho o las nueve, “pero sí está ella, la enfermera, y nos dijo que no era tiempo y por eso el bebé nació afuera”.

“Como ellos son los que mandan, no dije nada. Ellos están adentro, nosotros nos fuimos a una casita amarilla. Ahí entre la basura..., hay animales, hasta perros, ahí nació el bebé y quieren que hablara bien de los doctores”.

Ordena Salud investigar

La titular de la Secretaría de Salud, Mercedes Juan, instruyó a la Comisión Nacional de Arbitraje Médico y a la Dirección General de Calidad y Enseñanza en Salud, investigar el caso de Irma, e insistió que el gobierno federal está preocupado por este asunto y actuará en consecuencia. (Quadratín y Notimex).



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