Se decretó la suspensión de clases el próximo lunes, en cinco de los dieciocho municipios del estado,  se cerró a la navegación todos los puertos y se suprimió la circulación, por deslaves, en la carretera vieja Mazatlán-Durango, como medidas preventivas ante la amenaza de la tormenta tropical "Sonia".

El Gobernador del Estado, Mario López Valdez, reveló que cuerpos de auxilio y de la comandancia del puerto de Altata iniciaron la búsqueda de un pescador desaparecido de la zona del Castillo, cuya lancha fue arrastrada a la deriva por el leve oleaje que se resiente.

Dio a conocer que con el cambio en la alerta, se determinó cancelar las clases en todos los niveles escolares el próximo lunes, en los municipios de Culiacán, Elota, San Ignacio, Mazatlán y Navolato, donde se esperan  los mayores efectos del fenómeno natural.

El jefe del ejecutivo estatal, no descartó que esta medida se haga extensiva en el transcurso de la noche a los municipios de Angostura y Salvador Alvarado, en base al comportamiento que tenga la tormenta tropical en su desplazamiento por las costas del Pacífico.

Rafael Sanz Ramos, Director Técnico de la Cuenca Pacífico de la Comisión Nacional del Agua descartó que existan riesgos en el manejo de las presas, con las nuevas aportaciones de agua que se tendrán con lluvias pronosticadas de hasta 200 milímetros acumuladas.

Sobre el caso de la presa Sanalona, indicó que aún cuando esta conserva 640 millones de metros cúbicos de agua que equivalen al 95.8 % de su capacidad de conservación, aún se tiene capacidad de manejo para un volumen equivalente a más del 20 por ciento.

Dio a conocer que los desprendimientos de bandas nubosas de la tormenta tropical generan lluvias, sobre todo desde el centro de la entidad hasta el puerto de Mazatlán, con lecturas de siete milímetros en algunos puntos.

La Policía Federal de Proximidad reportó que deslaves sobre la carretera vieja Durango-Mazatlán, a la altura del kilómetro 237, por lo que se recomienda a los conductores utilizar la nueva supervisa.

Desde muy temprano las capitanías de los puertos de Altata, Mazatlán y Topolobampo recomendaron a los patrones de la flota camaronera suspender la explotación de la especie y buscar refugio, puesto que se cerró la navegación a todas las embarcaciones.